“Si la letra de la Carta Orgánica Municipal (COM) deja un vacío de aplicación, y no prevé el modo de subsanarlo, habrá que ver si la norma en cuestión es autosuficiente y a pesar del impedimento, puede conformarse Junta Electoral prescindiendo del vocal de Cámara y el juez de primera instancia”, señala Gustavo Bustamante.
“Cualquier intento de modificación, remiendo o agregado para suplir a los jueces sería inconstitucional, ya que una ordenanza del Concejo Deliberante no está legitimada para suplir la letra de la COM.
Es imposible y contrario a derecho que cualquier ordenanza emparche lo que la Carta Orgánica no dice.
Si los convenios con el Tribunal Superior de Justicia de la provincia no fueron realizados en tiempo y forma, fue responsabilidad de este Gobierno, el que, además, nunca convocó en los años no electorales a conformar un acuerdo vinculante con todas las representaciones políticas a fin de estipular un reglamento al menos”, añade el dirigente radical.
“Es desprolijo dejar siempre para el último, y más en un año electoral, este tipo de cosas... Pero es típico del peronismo en el poder pergeñar todo tipo de maniobras de especulación electoral, siendo capaces de llevarse puesto el mismo sistema republicano si se les atraviesa en el camino, con tal de acomodar los actos comiciales a su favor, sea manipulando fechas electorales, la elección de los presidentes de mesa, el modo de elección, imponer sistema de cupo, etcétera, etcétera.
En el año 2003 el desempeño de los miembros de la junta Electoral (vocal de Cámara y juez de primera instancia) fue vergonzoso”, juzga Bustamante.
“El problema es que de no resolverse esta situación de un modo lógico y consensuado, no se podrá conformar Junta Electoral Municipal y se retarda el llamado a elecciones, que estimo que el intendente tiene intenciones de anunciarlas el domingo próximo en la apertura de Sesiones Ordinarias ante el Concejo.
Lo cierto es que el espíritu de la Carta Orgánica había dispuesto dos miembros del órgano Judicial como garantía de transparencia para todo lo que implica el acto comicial. Pero eso dependía de convenios con el Superior Tribunal de Justicia. Y así lo expresa el artículo 189 en el penúltimo párrafo.
No es saludable a la democracia estar a las apuradas para resolver este inconveniente. Hay cosas que ya deberían estar reglamentadas hace tiempo, como sucede en las democracias modernas, por ejemplo, una fecha fija cada cuatro años para las elecciones municipales, para las primarias de partidos políticos, sistema de voto electrónico, no intromisión política en la elección de centros vecinales, etcétera.
Hoy se quiere resolver este vacío proponiendo a jueces federales, algo no previsto por la normativa. Es una desnaturalización y, por cierto, una rueda de auxilio para los intereses del gobierno de turno a fin de contentar sus especulaciones. Ocuparse de los actos de la política también es signo de buena gestión, proponer consensos sin mezquindades y con objetivos a largo plazo demuestra la convicción de que el sistema democrático siempre debe enriquecerse y mantenerlo sano sobre todo. Esto es lo que a veces demuestra la diferencia entre meros gobernantes, y estadistas”, concluye el dirigente, sumando su voz al debate iniciado hace algunos días.
