Sobre la calle Alem, en las paradas de colectivos más cercanas al Centro de Transferencia, había ayer por la mañana unas 50 personas esperando por el transporte. Casi todos los consultados por EL DIARIO manifestaron prácticamente lo mismo: desconocían el aumento que entró en vigencia el domingo en el boleto del transporte urbano de pasajeros.
“Es una moneda, no parece mucho, pero si tenés en cuenta que la mayoría viaja varias veces al día, a la semana ya es un número y al mes ya hay una diferencia importante”, calculó Esteban, empleado de comercio, sobre la tarifa en efectivo que saltó de los $6 a los $7 (aumentó 16,6%).
Marcos Durán y Federico Scialacomo, de unos 12 años, habían salido del IPET 49 (Escuela del Trabajo) y mientras esperaban el colectivo opinaron al respecto. “Yo viajo siempre, desde el centro hasta Las Playas, y no me gusta que aumente y tampoco el lío que hay que hacer para sacar la tarjeta nueva”, reclamó Marcos. El niño contó que “es muy complicado sacar la tarjeta SUBE; cambiaron todo, hay que hacer muchos papeles y todavía no pude”. El costo del pasaje con la tarjeta SUBE salía $5 hasta el sábado y pasó a $5,50.
“Yo voy para el barrio Rivadavia, no lo uso mucho, y no sabía que aumentaba el pasaje”, acotó Federico.
En general, los usuarios desconocían el incremento en el momento en que se realizó, pero también el común de las opiniones fue de conformidad con el servicio que brinda Emtupse.
“El pasaje, ¿cuánto cuesta?”, preguntó Nora al escuchar hablar sobre el tema. “La verdad es que desconocía del aumento, no tenía idea”, reconoció, y contó: “A mí me ha pasado que se rompió el colectivo, iba en uno de la línea 10. Aparte en el 10 te subís y tenés que limpiar el asiento con algo antes de sentarte por la mugre que tiene”.
Elizabeth, jubilada, fue una de las pocas que sabía del aumento, “pero no estoy de acuerdo”, aclaró. Con respecto al servicio que ofrece la Empresa Municipal de Transporte, sostuvo que “para mí es muy bueno, por lo menos los horarios los cumple, aunque eso no quiere decir que no haya que esperar mucho, porque las frecuencias entre un colectivo y otro podrían ser menores”.
Marta, del barrio San Martín, tampoco sabía que iba a aumentar. “Subí el lunes y me encontré con eso”. A ella este cambio, asegura, “me afecta mucho”. “Es que viajo muy seguido, por lo menos cuatro veces al día, porque no tengo vehículo, y $7 es mucho. Soy pensionada y no me sobra el dinero”, contó y dedujo que “tendré que gastar como $25 pesos por día”.
Oriundo de Ordóñez, Matías es estudiante y opinó que “el de Villa María quizás sea el boleto más caro de la provincia”, aunque reconoció que “no suele haber problemas con el servicio”.
Hacía un año que el boleto no aumentaba, aunque la suba a $7 estaba aprobada por ordenanza desde diciembre de 2013. A modo comparativo, en Córdoba capital el boleto tiene un costo $6,50 y en Río Cuarto de $6, por lo que Villa María, al igual que hace un año y tal como estimaba el usuario, tiene uno de los boletos más caros de la provincia.