“Pasamos el punto más crítico de esta catástrofe que sufre la provincia”, dijo el intendente de Villa María, Eduardo Accastello, ayer a la mañana, cuando ofreció una conferencia de prensa acompañado por vecinos de las zonas inundables y miembros del Comité de Crisis, como así también de referentes de los ministerios de Defensa, Seguridad y Desarrollo Social de la Nación, Policía, Gendarmería y Ejército.

Señaló que el máximo caudal del Ctalamochita se dio el miércoles a las 15 y que a partir de allí, comenzará a disminuir, dado que el Piedras Moras arroja desde la tarde de ayer -anoche analizaban disminuir aún más- 360 metros cúbicos por segundo, algo menos de los 390 que llegaron al punto máximo de la crecida.

Cabe recordar que en 2014, la peor parte de la inundación ocurrió cuando el dique enviaba 590 metros cúbicos al segundo.

“Le hemos pedido al ministro (Fabián) López que para el sábado, se reduzca a 200 m3/s la cantidad de agua que arroja el dique, porque así estaremos en mejores condiciones de superar el otro problema, que es el de las intensas lluvias”, puntualizó.

Grafica el aumento del caudal indicando que por el cauce del río, atraviesa un caudal 15 veces superior al habitual. “Ante ese nivel, no hay desagüe que tenga capacidad de drenar. Para eso tenemos 14 bombas a disposición, que utilizamos en la ciudad”, a la par que alcanza para enviar a la región.

Tras la rueda de prensa, Accastello recorrió en el helicóptero de la provincia, las zonas anegadas por el agua que baja de los campos, como Etruria, Pasco y Los Zorros; como así también la ciudad de Bell Ville, que ayer sufrió el máximo nivel de caudal del río. Informó que reforzaron esa localidad con más personal del Ejército y de Gendarmería, como así también con elementos tales como los gomones. Lo mismo hicieron con el resto de la zona afectada.

Agradeció a los vecinos que aportaron su trabajo organizado para proteger las defensas del río, que resultaron insuficientes y debieron ser reforzadas, tal como informamos ayer y que aún están sometidas a vigilancia permanente. “Me siento muy orgulloso de todos los vecinos, de las cooperativas, de los boy scout, porque entre todos defendimos la ciudad”, señaló.

“Hemos demostrado que somos una ciudad solidaria y que estamos organizados”, agregó.

“Estamos trabajando no sólo en resolver nuestra problemática, sino colaborando con la región”, dijo Accastello, quien fue designado por el gobernador José Manuel de la Sota como coordinador de las acciones en toda la cuenca del Ctalamochita, desde Piedras Moras a Bell Ville.

En lo que hace a la prevención sanitaria, indicó que mañana comenzarán a fumigar los barrios afectados para evitar la proliferación de insectos; asimismo, distribuyen repelentes en crema a cada familia de Vista Verde y Mariano Moreno y al personal que trabaja en el lugar.

 

Optimismo

“La mejor noticia que tenemos es que, según los pronósticos, no habrá lluvias hasta el lunes”, dijo, lo que permitirá la recuperación de las zonas anegadas. Sin embargo, reconoció que con un ambiente cargado con un 100% de humedad, las lluvias se forman con rapidez.

 

De la crítica al agradecimiento

Es la segunda rueda de prensa que ofrece Accastello para informar las acciones que se llevan adelante para prevenir los daños de la crecida. En la primera oportunidad, dio a conocer que había estado reunido con José Manuel de la Sota. Dada la gravedad de la circunstancias que se vivían, nadie le preguntó por la “reconciliación” con el gobernador, a quien viene cuestionando duramente.

En esta oportunidad, se refirió al tema: “Así como el año pasado criticamos la falta de información de la Provincia, hoy tengo que agradecer al gobernador de Córdoba el aporte que hace”, señaló el intendente villamariense, a la par que también agradeció a Aníbal Fernández, jefe de Gabinete de la Nación, por asignar partidas económicas para las zonas afectadas en la provincia por las inundaciones.

 

Lo que viene

Finalmente, el mandatario local se refirió a las acciones que realizarán una vez que baje el agua para evitar nuevas amenazas. “El año pasado nos dijeron que era un fenómeno que se da cada cincuenta años y vemos que no es así. No podemos estar en cada temporada de lluvia con bomberos, gendarmes y Ejército conteniendo el agua. Hay que buscar soluciones”.

En ese punto, dijo que la primera disposición fue la de asignar a los 35 arquitectos que trabajan en la Municipalidad para que hagan un relevamiento para planificar las obras que sean necesarias para tener defensas seguras.

Rutas cortadas