El fiscal que investiga el crimen de Andrea Belén Castana, hallada asesinada el viernes en el Cerro de La Cruz, en la ciudad cordobesa de Villa Carlos Paz, acusó ayer de "homicidio agravado por femicidio" a su exesposo, detenido anteanoche junto con otros dos hombres.
Según informó a la prensa el fiscal general de Córdoba, Alejandro Moyano, además del exesposo de Andrea, identificado como Juan Manuel Lazzaroni, fueron acusados de "encubrimiento agravado" tanto un hombre que aparentemente trabaja para él, llamado Diego Luján, como otro que durante los días de búsqueda dijo que se había cruzado a la víctima en el cerro y que había escuchado gritos, Fernando Villa.
El fiscal de Villa Carlos Paz Ricardo Mazzuchi sospechó del marido, quien aparentemente se separó de Castana "en malos términos" luego de que incurriera en algunas contradicciones en sus relatos y acciones, dijo ayer a Télam el director de Investigaciones Criminales de la Policía de Córdoba, comisario Daniel Moroldo.
"Está prácticamente descartado que el móvil del crimen haya sido el robo o el abuso sexual" por parte de terceros, dijo el jefe policial, y agregó que "la sospecha (que pesa sobre Lazzaroni) es la de haber tenido algo que ver con la desaparición de la mujer".
Paso por paso
Castana fue vista con vida por última vez el miércoles pasado alrededor de las 14, cuando después de dejar en el colegio a sus dos hijos de 6 y 8 años se dirigió en su auto Ford Ka al cerro La Cruz, donde estacionó y continuó a pie para hacer su caminata habitual.
Posteriormente, alrededor de las 17.30, Lazzaroni denunció que había tenido que retirar a sus hijos del colegio porque su exmujer no lo había hecho y desde ese momento comenzó una intensa búsqueda, de la que el hombre participó activamente. El jueves un amigo de Lazzaroni, que sería Luján, halló manchas de sangre, que se cree serían de Andrea, a la altura de la estación 8 del Vía Crucis que puede recorrerse a lo largo de unos 2.200 metros de camino dentro del cerro.
El viernes por la mañana, los investigadores encontraron un cuerpo, aunque no era el de Castana, sino el del fotógrafo Hernán Sánchez (34), que estaba desaparecido desde el 19 de diciembre pasado y, por lo tanto, no tendría relación con la muerte de la mujer.
También el viernes, cerca de las 16, los investigadores hallaron una remera blanca con corazones negros, un pantalón y medias que los homicidas habían ocultado en el fondo de una cámara de agua en la estación 4, con el peso de unas piedras para que no flotaran.
Fue el propio Lazzaroni quien supuestamente encontró una de las medias en las cercanías de la cisterna, lo que luego permitió conducir la atención al resto de las prendas.
Finalmente, cerca de las 18 las autoridades hallaron el cuerpo de Castana, desnudo y semitapado con rocas y tierra, junto a un árbol ubicado a unos 300 ó 400 metros de la estación 9.
Sin signos de abuso
De acuerdo con el relato de los informantes, el cuerpo de Andrea no tenía signos de abuso y no tenía marcas visibles de heridas cortantes ni producidas por arma de fuego, aunque se esperaba el informe de la autopsia para conocer la mecánica de la muerte.
El fiscal Mazzuchi también encargó levantamiento de rastros y búsqueda de huellas con la intención de determinar la identidad de los autores del hecho, cuál fue la escena del asesinato y si el cuerpo fue movido luego del crimen.
Sospechas
Una de las cuestiones que averiguaron los pesquisas es que la víctima y Lazzaroni aún mantenían conflictos y por esa razón y por alguna situación sospechosa -como, por ejemplo, que el lugar donde Lazzaroni dijo que había encontrado la media ya había sido inspeccionado anteriormente- es que el fiscal del caso cree que el exmarido está involucrado en el crimen.
En ese sentido, una de las hipótesis de los detectives es que tanto Lazzaroni como sus amigos en realidad no colaboraron con la búsqueda, sino que estaban en el lugar con la intención de encubrir su participación en el homicidio.