Un caso de presunto “abuso sexual” empezó a juzgarse ayer en la Cámara del Crimen de Villa María por un hecho ocurrido la Navidad de 2013 en la ciudad de Oliva, que tomó estado público cuando se viralizó un video íntimo en el que aparece la víctima manteniendo sexo oral con un hombre al que no se le ve la cara.
El acusado es Heraldo Francisco Ramón Pericón, quien comparece privado de la libertad, imputado como supuesto autor de “abuso sexual con acceso carnal”, un delito que es reprimido con prisión de seis a 15 años.
Pericón, alias “Cachi”, de 31 años de edad (25 de julio de 1983), se encuentra detenido desde el 16 de febrero de 2014, unas tres semanas después de que el video en cuestión se subiera a Internet y se hiciera público al propagarse por teléfonos celulares y redes sociales.
En su momento, el hecho tuvo inesperadas derivaciones: por un lado, el suicidio de la madre de la menor poco después de ver la filmación, y por otro, que la propia chica admitió haber mantenido relaciones sexuales, aunque negó que el hombre que aparece en las imágenes sea Pericón.
La afirmación de la adolescente fue hecha durante la sesión de Cámara Gesell que se le realizó una vez iniciada la investigación judicial del hecho, en la cual dijo que la persona del video no es Pericón, sino un chico de su misma edad.
Antes que todo eso sucediera, más precisamente el 23 de enero del año pasado, la madre de la jovencita denunció el caso luego que el video llegara a su teléfono celular. Fue así que se presentó en la Comisaría de Distrito Oliva y, tras la presentación policial, se dirigió indignada al domicilio del supuesto abusador.
Para que el caso tuviera aún más dramatismo, horas después la mujer fue hallada muerta en la vivienda de Pericón. La encontraron ahorcada.
Este hecho disparó conjeturas de todo tipo y conmocionó a la opinión pública olivense, aunque la investigación policial y judicial realizada determinó que la mujer se había suicidado y que no se trató de un homicidio, como se especuló en un comienzo.
Durante la audiencia realizada en la víspera, inicialmente Pericón se abstuvo de declarar y luego se receptaron cuatro testimonios en la sala ubicada en el quinto piso de Tribunales: declararon la hermana, una tía y una amiga de la adolescente, además de un funcionario policial que trabajó en la investigación del caso.
Como se trata de un hecho de instancia privada, en el que -además- la supuesta víctima es menor de edad (actualmente tiene 16 años), el debate se realiza a puertas cerradas, es decir sin el acceso al recinto del público en general ni de los medios de prensa en particular.
No obstante, pudo saberse que tras escuchar a los testigos convocados, el fiscal de Cámara, Francisco Márquez, y el abogado defensor, Mario Bongianino, acordaron incorporar el resto de la prueba por lectura, y posteriormente la jueza Silvia Saslavsky de Camandone dispuso un cuarto intermedio hasta hoy para la etapa final del proceso oral y privado.
El debate se reanudará a las 9 con los alegatos de las partes y concluirá en horas del mediodía con el dictado de la sentencia correspondiente.