Los barrios que están inmediatamente después del puente Isidro Fernández Núñez o comúnmente conocido como “puente negro”, han crecido notablemente en los últimos años y, por lo tanto, el tránsito por la zona también.

A raíz de esto, algunos vecinos manifestaron su descontento por el estado del puente y la necesidad de “construir uno nuevo o ampliar el que está”.

“En los horarios pico, se forma una cola de autos importante para cruzar hacia Villa María, y se acumulan autos desde todos lados que esperan el semáforo, entonces la circulación se hace realmente difícil, porque mientras está el verde son pocos los vehículos que pueden cruzar”, relató Denis.

El vecino mencionó que “es sabido que, de por sí, se trata de un puente muy peligroso, porque es angosto y muchas veces las motos y bicicletas no respetan el semáforo y cruzan igualmente pese a que vienen autos de frente”, pero que en el último tiempo la situación se agravó porque “el tránsito se incrementó mucho porque los barrios han crecido”.

Otro de los frentistas que reside en cercanías del puente planteó que “se hizo un puente nuevo en un lugar donde ya había uno que servía y funcionaba bien”, haciendo referencia al colgante “Juan Domingo Perón”, en la zona de las compuertas, por lo que insistió: “Este es un sector de mucho movimiento, sin embargo no sé en qué se pensó para hacerlo allá y dejar este en las condiciones en las que está”.

Nicolás remarcó que “no sólo del lado de Villa Nueva es la complicación, en la parte de Villa María cuando se acumulan más de tres autos para cruzar esperando el semáforo, la costanera ya queda interrumpida porque nadie sabe por dónde pasar”.

El tema también fue motivo de intercambio de opiniones en las redes sociales. Por ejemplo, en un grupo de Facebook integrado por villanovenses, la referente del radicalismo de esa ciudad, exconcejala y exprecandidata a intendente, Sandra Bailone, opinó que “la verdad que Villa Nueva necesitaba un puente en sectores de mayor movimiento, sin embargo el nuevo puente se instaló donde lo necesitaba la ciudad de Villa María”.

“Este puente se ha arreglado, roto, vuelto a arreglar, siempre emparchando lo que es una infraestructura vieja y deteriorada que debe adecuarse a la demanda de un sector de la ciudad que necesita más fluidez para ir de una ciudad a otra”, acotó una vecina, quien también reconoció: “Lógicamente es muy poco probable que se haga un puente nuevo pero ¿no sería coherente tener uno de doble mano? De este lado se hizo la rotonda y quedó bien, pero no solucionó el problema de fondo”.

“Sinceramente no tengo recuerdos de algún proyecto o algo similar para embellecer, reformar o hacerle algo a este puente, ni de Villa María ni de Villa Nueva”, analizó la mujer.