Se lanzó oficialmente ayer a la mañana un segundo precandidato a la Intendencia por la Unión Cívica Radical.
Se trata del ingeniero, comerciante y docente José Luis Bonvin, quien se enfrentará el 3 de mayo próximo en las internas del partido con el abogado y actual presidente del Tribunal de Cuentas, Ignacio Tagni.
Bonvin viene a representar de esta manera a los integrantes del núcleo Línea de Integración Reformista Radical, que tiene en sus filas a la exconcejala y actual vicepresidenta del comité, Sandra Bailone, presente ayer en la rueda de prensa.
En su aparición en sociedad, dijo que hace años se viene madurando este proyecto y aclaró que no es una presentación intempestiva sino consecuencia “de un tiempo importante de trabajo”, que se da en un marco democrático. “Contamos con recursos humanos y un potencial de votos que creemos tener”, señaló.
Admitió que las internas “significan un costo adicional” pero que la harán “lo más austera posible” y apuntó que “hay personas muy honorables” en el sector de Tagni.
Cuando se le preguntó si recibió el visto bueno de las autoridades del comité para lanzarse al ruedo, consideró que la cúpula “no debería hacer objeción alguna”.
Esquivó confrontar con Tagni pero en un momento sostuvo que el de aquel significó “un lanzamiento anticipado de campaña, hablaron de consenso pero fue prematuro”.
Cuando se le comentó que el actual tribuno había dicho a EL DIARIO que contaba con la adhesión del 90% de los afiliados, respondió que esas expresiones “corren por cuenta y cargo de él”.
La situación local
Bonvin manifestó que la situación villanovense “no pasa desapercibida para nadie” y evaluó que “las necesidades están a la vista”.
En obras públicas, indicó que hay olvido en el mantenimiento. “La avenida Libertad está muy deteriorada”, ilustró.
“Hay cuestiones que tienen que ver con los sectores más desprotegidos de la sociedad. En niñez y en la tercera edad hay mucho por hacer. Existen sectores con muchos problemas económicos. A la gente hay que darle el pescado pero también enseñarle a pescar”, aseveró.
En tanto, interpretó que la Municipalidad “no escucha al vecino como debiera ser” y rescató a las instituciones intermedias, que “son de excelentísimo nivel”.
Bonvin aclaró que no tiene motivaciones económicas al lograr un cargo de esta naturaleza, ni tampoco entra en juego el ego personal, sino que “se trata de devolver a la vida todo lo que me ha dado”.
“Pensamos que la sociedad debe entender a la interna como un elemento necesario y positivo. Creemos que nuestro proyecto es muy bueno”, comentó.
En cuanto a un eventual acuerdo con partidos como el PRO o el ARI, advirtió que la Convención de Gualeguaychú le deja librado el camino a los comités locales. “No cerramos las puertas” al diálogo con otras fuerzas, deslizó.
Y finalmente recalcó que este núcleo refleja una “renovación” dentro del partido, aunque “no necesariamente hablamos de edad”.