La Justicia ordenó se tramite la acción de amparo contra la Municipalidad de Córdoba y el Gobierno de la Provincia para que cesen y recompongan el daño ambiental causado por el enterramiento de residuos sólidos urbanos en un predio de la localidad de Bouwer, próxima a la capital provincial.
La Fundación para la Defensa del Ambiente (FUNAM) informó que el vertedero, ubicado a unos 20 kilómetros al sur de la capital provincial, “fue cerrado el 1 de abril de 2010 gracias a la lucha vecinal y desde entonces sigue la contaminación ya que no se ha remediado el predio”.
La acción de amparo había sido promovida en noviembre de 2013 por 26 adultos y 17 menores de Bouwer acompañados en la presentación por Raúl Montenegro, titular de la FUNAM, y por el abogado patrocinante Federico Macciocchi, de la Fundación Club de Derecho.
Según se informó, el municipio capitalino “debe contestar ahora la demanda y ofrecer la prueba. No obstante ello, el juez le ha requerido que informe el estado de las actividades de remediación del predio que la jueza de Alta Gracia le había ordenado iniciar en un plazo de 180 días contados a partir del 23 de diciembre de 2013”.
Al respecto, Montenegro señaló que “hasta ahora la Municipalidad de Córdoba nunca presentó un proyecto serio de remediación a la Municipalidad de Bouwer”.
Desobediencia municipal
“Es asombroso y preocupante comprobar cómo la gestión de Ramón Mestre (intendente de Córdoba) desobedeció impunemente lo ordenado por la justicia durante casi un año y medio”, añadió.
Por otra parte, sostuvo que el Gobierno de la Provincia “tampoco hizo caso de la exhortación de la Defensoría del Pueblo de la Nación, que por Resolución Nº 102 del año 2010, hace más de cuatro años, le requirió hacer un diagnóstico de salud en Bouwer y en el complejo carcelario”, ubicado en esa misma localidad.
Montenegro agregó, finalmente, que la Municipalidad de Córdoba y el Gobierno provincial “transformaron a Bouwer en zona de sacrificio y quieren seguir contaminándola, no les importa que la gente enferme por culpa de la basura ajena y mal gestionada”, concluyó.