En la iglesia Catedral y en todas las parroquias de la ciudad se realizó anoche el Vía Crucis.
La conmemoración central se produjo en el mayor templo católico de Villa María. A las 18 en punto comenzó la Adoración de la Cruz en la Catedral. La presidió el obispo Samuel Jofré Giraudo.
Los fieles colmaron el lugar, pese a tratarse de una tarde calurosa.
Al terminar del oficio se inició el Vía Crucis alrededor de la plaza San Martín, luego por calle Buenos Aires hasta bulevar Cárcano, siguiendo por esta arteria hasta la costanera y más tarde por la ribera hasta inmediaciones del puente colgante Juan Domingo Perón.
Según confirmó una alta fuente de la Iglesia Católica consultada en la víspera por EL DIARIO, se efectuó el Vía Crucis en cada una de las seis parroquias de Villa María.
Sin misa
Uno de los sacerdotes consultados por este matutino recordó que el Viernes Santo es el único día del año en que no hay misa, porque Cristo ha muerto.
En cambio, “se celebra la pasión de Jesús, su entrega generosa y se adora a la cruz como signo de salvación”.
El Vía Crucis es una devoción centrada en los misterios dolorosos de Cristo. “Es la actualización de su muerte. Cuando se celebra la liturgia se actualiza”.
En este sentido, jóvenes y adultos de distintos templos recrearon anoche el sufrimiento de Jesús a lo largo de 14 estaciones.
Pese a no haber misa, sí se recibió ayer la eucaristía, que se guardó (fue consagrada) durante el Jueves Santo.
Por otra parte, en la noche de hoy, Sábado de Gloria, habrá las primeras vísperas del domingo de Resurrección.
Además, la juventud católica ha previsto desarrollar una convivencia de vigilia entre las 10 y las 16 en la Parroquia San Ignacio de Villa Nueva, con un almuerzo a la canasta. La actividad está destinada a mayores de 16 años. Mañana, en Pascuas, “compartiremos la alegría en una mateada y guitarreada en la colinita del Reloj de Sol”, en la costanera villamariense desde las 16, según lo indicado a este medio.