"Era en cancha nuestra y llena. Necesitábamos ganar y por suerte logramos los tres puntos”. Así, con una euforia prácticamente al máximo, describió sus sensaciones el volante Maximiliano Le Roux, tras el triunfo por 4-3 de Alem ante Central Córdoba de Pilar, por el partido de ida de las semifinales.

Le Roux, además, recalcó que “con Alem siempre se sufre” de acuerdo a como aconteció el partido. “Por más que no se pudo hacer un muy buen partido este es un triunfo muy importante”, valoró a continuación.

“Ellos nos complicaron mucho porque no se jugó bien, pero se ganó, que era el objetivo”, expresó y agregó “nos quedan 90 minutos, en los cuales hay que viajar a una cancha dura y en la cual seguramente será un partido muy peleado como lo fue esta noche (por ayer)”, comentó.

En otro punto de la charla en zona de vestuarios, “Maxi” recalcó que “se ganó porque tenemos jugadores que no perdonan debajo de los tres palos, como Martín (Porporatto), a quien le quedaron dos o tres y concretó. Tenemos esa suerte, pero también respaldado por un muy buen equipo”.

En cuanto a la revancha, Le Roux indicó que “hay que ir tranquilos. Tenemos un gol de diferencia, que es valioso, así que habrá que ver qué proponen ellos pero nosotros les jugaremos de igual a igual”.

Y, por último, resaltó el apoyo del hincha: “Al hincha sólo se le puede agradecer todo lo que hace por nosotros. Están siempre, en las buenas y las malas, y eso se notó hoy, ya que cantaron y alentaron en todo momento”.

El defensor, capitán y entrenador, Cristian Agosto, subrayó la actitud de Alem: “Se vio que tuvimos mucho huevo. Eso nunca le va a faltar a este equipo. Pudimos revertir esto con mucho corazón y garra después de un muy mal primer tiempo, en los cuales ellos nos sorprendieron”.

“Por suerte pegamos primeros y el domingo que viene vamos por la revancha”, añadió.

Como cierre, el arquero Matías Gómez comentó: “Después del gol de ellos, quedé muy amargado, todavía lo estoy, pero por suerte después los compañeros lograron darlo vuelta y conseguir la victoria”.

El joven arquero, en tanto, explicó dicha acción desafortunada: “Justo teníamos una pelota parada a favor nuestro y me agacho a subirme las medias y, con la hinchada atrás, no escuché nada. Y cuando levanté la vista ya lo tenía cerca del arco al delantero”.

“Alem ganó por los huevos que tiene. En todas las líneas hicimos un sacrificio tremendo para poder lograr esta victoria”, cerró.