He leído con entusiasmo que el Gobierno municipal de Eduardo Accastello se propone restaurar y poner en funcionamiento el Túnel Hermanos Seco.
Como fundador de la Comisión Amigos del Túnel, la que nació al ver que para construir el Subnivel se tapaba de escombros ese histórico lugar y en adelante exigió el desalojo de desperdicios hasta obtener que fuera declarado Patrimonio Histórico, acompañada por cerca de un centenar de integrantes, entre ellos el exintendente Horacio Cabezas, los arquitectos Víctor Fonseca y Carlos Pajón, la escritora Mónica Fornero, el exconcejal Jorge Gómez, Alejandro Zayat, Jorge Rolotti y otros, e incluso trabajó junto al municipio para encontrar modalidades de recuperación de ese lugar, no puedo menos que sentir el orgullo que traslado por la distancia de Córdoba a Villa María a todos quienes participaron de esta empresa.
En ese transcurso organizamos tres muestras de artistas plásticos villamarienses, cordobeses y de otras provincias dentro del túnel, en reclamo por su recuperación, así como un certamen de literatura alusiva convocado por la SADE, en ese entonces presidida por el poeta Eduardo Belloccio, quien se unió al reclamo no sólo por recuperar ese espacio de acuerdo a su historia sino también, en adelante, por habilitarlo como paso para evitar cruzar por las vías del tren, tan peligrosas de por sí.
No puedo menos que recordar al compañero Aldo Ruiz, a Dody Balderramo, Olga Delgado, Matías Giletta y a tantos que nos movilizamos durante años, incluso llevando muestras de nuestro archivo periodístico a los colegios y dando charlas a alumnos y docentes a fin de multiplicar el reclamo y finalmente ser atendidos. También al recientemente desaparecido arquitecto Carlos Pajón quien junto a su colega Víctor Fonseca elaboraron un proyecto que permitía mantener la arquitectura original del túnel, de 82 metros de longitud, restaurar y terminar de instalar las cerámicas construidas en épocas de Cabezas por la Escuela de Bellas Artes Emiliano Gómez Clara y, fundamentalmente, darle salida al túnel hacia la avenida Yrigoyen y por el lado opuesto hacia el Concejo Deliberante.
La memoria me devuelve imágenes de aquellas largas mañanas que pasamos en la Dirección de Cultura junto al entonces titular Rubén Rüedi, informando -tal cual lo pidió la exintendenta Nora Bedano en aquel momento, tras haberse declarado el lugar Patrimonio Histórico- de los proyectos de restauración que había elaborado la Comisión en pleno con sus dos arquitectos al mando de las iniciativas.
El hecho de que muchos de los que protagonizamos más de tres años de reclamos cargados de iniciativas y creatividad -que se hallan en gran medida en los archivos de EL DIARIO- defendamos desde antes de ese entonces el Proyecto Nacional y Popular y hoy, como desde hace tiempo, dando nuestro respaldo a Eduardo Accastello , pone en primer plano la necesidad de que la Intendencia al recuperar este espacio que fue y es símbolo del crecimiento independiente del país, tan golpeado en su nacimiento como hoy por los intereses imperialistas y oligárquicos que pretenden impedir nuestro desarrollo, condenándonos a ser productores de materia prima, incluya a la Comisión Amigos del Túnel y sus integrantes en los festejos por la recuperación de ese lugar histórico único por sus características en la historia ferroviaria, y más aún hoy en que desde la Presidencia de la Nación se impulsa la total restauración de este medio de transporte inigualable que permitió y permitirá más crecimiento e inclusión en nuestra Patria.
Jorge A. Torriglia