El decano del Instituto de Ciencias Humanas de la Universidad Nacional de Villa María, Luis Negretti, manifestó ayer por escrito su voluntad de disponer de su propio cuerpo en favor de la casa de altos estudios local para que sea de uso exclusivo en la carrera de Medicina tras su fallecimiento.
Lo hizo al término de una conferencia brindada para dar detalles de la especialidad (ver página 11).
“Es mi voluntad que mi cuerpo sea utilizado para fines didácticos o de investigación, manifestando expresamente mi deseo de que el mismo no sea desmembrado”, dice una de las clásulas del documento que suscribió.
La utilización del cuerpo por la Universidad será posible por un período de ocho años posteriores a los tratamientos necesarios para su uso en docencia e investigación. Luego deberán ser entregados a sus herederos universales para que dispongan de su entierro o cremación en donde lo consideren.
Negretti manifestó además su consentimiento para que la casa de altos estudios, una vez efectivizada la entrega del cuerpo, haga mención a su persona en la placa destinada a aquellas personas que realicen este tipo de contribuciones. Y dejó asentado que sus córneas podrán ser extraídas previo a la entrega de las exequias a la facultad.
El documento fue firmado públicamente teniendo como testigos a Pedro Trecco, director de Salud de la UNVM, y Gloria Vadori, secretaria académica del Instituto de Ciencias Humanas.
Negretti tiene 42 años y busca instalar el tema para un debate social. “Villa María tiene que hacerse planteos sobre la necesidad de que contemplemos la posibilidad de donar nuestros cuerpos a la ciencia”, señaló (ver “La imperiosa necesidad...”)
Para el gesto que concretó en la víspera, hizo uso del artículo 61 del Código Civil y Comercial, que dice textualmente: “Exequias. La persona plenamente capaz puede disponer, por cualquier forma, el modo y circunstancia de sus exequias e inhumación, así como la dación de todo o parte del cadáver con fines terapéuticos, científicos, pedagógicos o de índole similar. Si la voluntad del fallecido no ha sido expresada, o ésta no es presumida, la decisión corresponde al cónyuge, al conviviente y en su defecto a los parientes según el orden sucesorio, quienes no pueden dar al cadáver un destino diferente al que habría dado el difunto de haber podido expresar su voluntad”.
En tanto, el directivo anticipó que en la próxima sesión del Consejo Superior se presentará un proyecto de resolución sobre el trato digno que se debe otorgar a los cadáveres o partes de ellos que se utilicen con fines pedagógicos o de investigación.
Asimismo se dispondrá que por cada persona que haya efectivamente concretado la donación de su cuerpo se coloque una placa a la sombra en un árbol a seleccionar en la plaza de la Interculturalidad ubicada en el Campus, “como homenaje a la contribución, a la investigación y a la formación de médicos” en la institución universitaria local.
La imperiosa necesidad de contar con cadáveres
En la conferencia de prensa de la víspera, Negretti dijo que en el mundo los didactas de la Medicina “coinciden en el valioso aporte que realizan a la enseñanza las nuevas tecnologías en materia de simuladores, pero también unánimemente coinciden en que el estudio sobre el cuerpo humano resulta indispensable”.
El doctor Alberto Dain, coordinador de la carrera Medicina de la Universidad villamariense, subrayó que “el cadáver sigue siendo indispensable”. Negretti añadió que en países de Europa “sobran cuerpos” para su estudio, “pero en la Argentina es difícil conseguir”.
Una tabla simulador
En este contexto, en 60 días la UNVM estaría recibiendo un “anatomage”, una tabla simulador virtual 3D desarrollada por investigadores de la Universidad de Stanford y fabricada en el Estado de California. “Se trata de la herramienta pedagógica más avanzada del mundo para la enseñanza de la anatomía humana”, indicaron ayer. Y se remarcó que no está disponible en ninguna universidad pública de Argentina. Además se presume que lo tendría sólo una de las privadas.
La empresa fabricante ofrece capacitación para la utilización de esta tecnología.
Más allá del avance, los profesionales comentaron en la víspera que “lo óptimo siempre es trabajar sobre el cuerpo humano”.