Al menos dos delitos contra la propiedad se produjeron en las últimas horas en la ciudad según informaron desde la oficina de prensa de la Departamental San Martín.
El primero de ellos se registró en pleno centro de la ciudad, en la cuadra del 400 de la calle José Ingenieros, entre La Rioja y Salta, a las 23 del pasado miércoles.
Allí, una mujer de 32 años, fue sorprendida mientras caminaba por dos sujetos que circulaban en una motocicleta, quienes, sin mediar palabras le arrebataron la cartera en la que llevaba dinero en efectivo, un teléfono celular y la documentación personal.
La víctima, ni bien salió del asombro que le causó el hecho, formuló la denuncia del mismo en la Comisaría.
Efectivos de la División Investigaciones tomaron el caso en sus manos aunque por el momento no hay detenidos por el arrebato.
Una moto
El segundo robo tuvo lugar a las 17 de ayer en Teniente Ibáñez al 800 una vecina del sector que poco antes había dejado estacionada en la vía pública su Guerrero Trip, sin medidas de seguridad.
Más trabajo para los efectivos de la División Investigaciones, que deberán actuar con rapidez si quieren esclarecer el caso, ya que como hemos dicho en otras oportunidades en estas páginas, desarmar una moto, para manos hábiles, puede demandar unos 15 minutos. Y después, es imposible de rastrear.
Al calabozo por conducción peligrosa
Por otra parte, dos jóvenes, uno de 26 y otro de 22 años, fueron a parar al calabozo el miércoles cuando caía la noche por “conducción peligrosa y desórdones públicos”.
Ocurre que los muchachos tripulaban una Zanella 90 centímetros cúbicos y “circulaban por Buenos Aires y Monseñor Antuña, realizando maniobras peligrosas y poniendo en riesgo su integridad física y la de terceros”, señalaron fuentes policiales.
Cuando los efectivos que realizaban un control vehicular quisieron identificados, los motociclistas “adoptaron una actitud agresiva hacia el personal policial, a quienes comenzaron a insultar y proferir improperios, generando además un desorden en la vía pública”.
Accidente
También se registró un accidente de tránsito ayer, aunque sin graves consecuencias.
Eran las 15.40 cuando, en San Juan y bulevar España, por motivos que se tratan de establecer, colisionaron un Chevrolet Corsa afectado al servicio de remises, conducido por José Enrique Crotis (45) y una Guerrero Trip guiada por María Gabriela Moya (44), quien iba acompañada por sus dos hijas de 6 y 10 años de edad, respectivamente.
Como consecuencia del impacto, las menores fueron trasladadas por Bomberos Voluntarios al Hospital Regional Pasteur.
Sufrieron lesiones leves.