Son 62 los estudiantes que recibieron ayer su primer delantal blanco como símbolo del inicio de su carrera de Medicina en la universidad local. Fue en un acto realizado a primera hora de la mañana en el aula 1-B del Campus de la Universidad Nacional de Villa María (UNVM), al que asistieron no sólo estudiantes y docentes, sino también familiares y amigos de la primera cohorte de Medicina, oferta que se agrega desde este año al espectro de carreras de la casa de estudios, que el sábado cumplió 20 años de existencia.
La ceremonia comenzó con la distinción que recibió la aspirante mejor calificada, Guillermina Budano, quien obtuvo 8,90 de promedio en el curso introductorio. El promedio del conjunto fue de 7,20. Los postulantes debieron aprobar 11 exámenes parciales y obtener un promedio general igual o superior a 6.
Camila Airaldi fue la primera en calzarse el guardapolvo y la siguieron sus compañeros provenientes de distintos lugares de la región y con variadas historias personales.
El más veterano del grupo es Cristián Redolfi, un enfermero de 50 años que viajará todos los días desde Hernando para cumplir con su sueño de juventud.
También Ghisella Cárdenas Durán, una kinesióloga chilena radicada en Villa María, y María José Etcheverry, una bioquímica y farmacéutica que va por su tercer título universitario.
Asimismo, en la fila recibió su uniforme la riocuartense María Lourdes Genghini, cuya familia le recomendó Villa María por ser “una ciudad parecida a Río Cuarto; segura y tranquila”.
Padres y madres, algunos con pequeños hermanitos en brazos, cámaras en mano, inmortalizaron el momento en que sus hijos lograron el ansiado ingreso tras un curso introductorio que arrancó en agosto del año pasado.
El local repleto tuvo una nota distintiva por lo familiar, lo que fue destacado por el diputado Martín Gill, presente en la ocasión: “Esto no ocurría antes. Cuando empezábamos nuestras carreras universitarias, les pedíamos a nuestros padres que nos dejaran unas cuadras antes porque aparecer con la familia era un estigma. Hoy se entiende que empezar en la universidad es un logro de la familia también”.
La vicerrectora, María Cecilia Conci, dio la bienvenida a los ingresantes y declaró el orgullo de la institución a la vez que “nuestra emoción y compromiso, ya que es un logro de toda la universidad”.
Se disculpó por no poder brindar la comodidad que demandaba la cantidad de visitantes y anunció que en mayo se habilitará un auditorio para 450 personas. En tanto, Gill, en su condición de rector con licencia, consideró que el acto de ayer “no es un punto final, sino de partida” y destacó que la carrera de Medicina estuvo precedida por accionesque la hicieron posible, como la oferta en Enfermería, Terapia Educacional y Educación Física y, asimismo, la creación del Centro de Salud.
A continuación deseó que “tengamos la mejor carrera de Medicina que podamos tener y que salgan los mejores médicos del país” y afirmó que “impulsar una universidad inclusiva, para todos, no se contrapone con procurar la calidad”.
El político y docente manifestó asimismo que “la Argentina posee una de las mayores tasas de médicos por habitante del mundo, pero los profesionales están desigualmente distribuidos, aún en el interior de nuestra provincia. Por eso se justifica que abramos esta carrera, donde esperamos que las prácticas se realicen en centros de la región y que los que egresen vuelvan a sus poblaciones de origen”.
Por otra parte, apuntó a que los médicos de la UNVM “deberán estar muy comprometidos, no sólo con la ciudad y el país, sino con la humanidad; esta carrera tiene un perfil profundamente humanista”.
El Estado nacional aportará durante seis años la suma de 108 millones de pesos para el funcionamiento inicial de Medicina en Villa María.
A su turno, el decano de Ciencias Humanas, Luis Negretti, anunció que “en breve, el resto de los 300 aspirantes que no pudieron ingresar tendrá una nueva oportunidad”. Al explicar el simbolismo del guardapolvo blanco, dijo que es el más significativo para los pacientes, junto con el estetoscopio, el espejo en la frente y el maletín. “Simboliza confianza, pureza, vida, prudencia y paz”, expresó.
“Está muy estudiado que los pacientes esperan que su médico esté vestido con guardapolvo blanco, bien peinado, pulcro y elegantemente vestido”, añadió Negretti, de profesión abogado.
La primera clase, que comenzó minutos después en otra aula del Campus, fue dictada por el coordinador de la carrera, Alberto León Dain, y se tituló “Ser médico”. El plantel docente es egresado de las facultades médicas de la ciudad de Córdoba y fue seleccionado entre 300 postulantes.
“Cero peso”
Entrevistada por EL DIARIO, la chilena Cárdenas Durán hizo una breve comparación entre la educación superior trasandina y la nuestra. “En Chile la carrera de Medicina está orientada a lo biomédico mientras que en la Argentina está más dirigida a lo biosocial”. Por otra parte, estimó que estudiar en su país la nueva carrera le supondría una inversión de 60 mil dólares mientras acá “me cuesta cero peso”.
El guardapolvo lleva el logo institucional y el nombre bordado de cada alumno y será de uso obligatorio en las actividades prácticas.
Un tercio de los estudiantes es de Villa María o Villa Nueva y el resto de 25 localidades. La edad promedio es 21 años y un porcentaje significativo se trata de jóvenes profesionales de otras disciplinas vinculadas a la salud, como fisioterapeutas, enfermeros o instrumentadores quirúrgicos.
La carrera ya posee una costosa bibliografía, un set completo de preparados histológicos y está en proceso de licitación material didáctico como esqueletos humanos, cráneos desmontables, corazones, riñones y demás.
Nómina de ingresantes
Airaldi, Camila Agostina
Aquino, Gisela
Arce Basconcelos, Braian
Armandi, Antonela
Ayala, Florencia
Becerra, Valentín
Bosco, Sofía Belén
Brito, Gabriel Ezequiel
Budano, Guillermina
Budassi, Elisa
Bussano, Micaela
Cabrera, Albano Delfo
Cárdenas Durán, Ghisella
Cárdenas, Rojas Ana
Carmona, Cintia Celeste
Chappex, Ileana
Chávez Cáceres, María Angel
Chialvo, Axel Gabriel
Cremonezzi, Juan Cruz
Cura, Leila Abigail
Devalis, María Bernarda
Dolman Coppari, Julieta
Espinosa, Aylén Malena
Etcheverry, María José
Faure, Daniela
Gallo, Alejandro Martín
Genghini, María Lourde
Glucksberg Zavalla, Leonardo
Gómez, Ayelén Macarena
Guasconi, Aldana Valeria
Heredia, Mariano Hernán
Iruretagoyena, Pamela Belén
Isaía Daher, Julieta
Iturria, Ignacio
León, María Elisa
López, María Florencia
López, Tadeo Joaquín
Luciano, Yanina Florencia
Luque, Daniela Belén
Maldonado, Sebastián Javier
Marcantonio, Facundo Miguel
Martínez, María Belén
Meitre, Agostina
Milanesio, Micaela
Monina, Carola
Paz, Pablo Ignacio
Reartes, Facundo Maximiliano
Redolfi, Cristián Marcelo
Renzi, Grecia Jacqueline
Reynoso, Laura Graciela
Romagnolli, Antonella
Romero, Rodrigo Matías
Rovira Fuentes, Julieta
Sales, María Emilia
Sánchez Magri, Martina
Santángelo, Camila
Sarmiento, Flavia Lourdes
Sbeghen, Juan Cruz
Tomattis, Ana Clara
Tula, Mariana Laura
Vignoli, Matías Sebastián
Vivas Peralta, Emanuel
FOTO 2: Es kinesióloga, es chilena y comienza nuevos estudios en Villa María
FOTO 3: Padres, abuelos, novios, amigos estaban desde antes de las 8 para no perderse detalles
FOTO 4: Camila Airaldi, por esas cosas del abecedario, fue la primera en vestir el uniforme
FOTO 5: El alumnado espera impaciente el llamado a vestir el guardapolvo que lo identificará en Medicina