Los trabajadores de la Fábrica Militar de Pólvoras y Explosivos de Villa María resolvieron “profundizar las medidas de acción directa” ante la falta de solución a los reclamos realizados al organismo nacional.
La decisión se tomó, ayer, en el marco de una asamblea que tuvo lugar en el establecimiento ubicado en avenida Savio tras conocer la respuesta de las autoridades que no aportan ninguna solución a los planteos del sindicato.
La resolución de los empleados villamarienses será llevada hoy a la mesa de un plenario que se realizará en Capital Federal con representantes de todos las fábricas militares y de la sede central de la Intervención.
“Nosotros vamos a plantear nuestra decisión en el plenario nacional y se analizará los pasos a seguir”, expresó el integrante del Consejo Provincial de ATE José Goroso consultado por EL DIARIO.
El gremio, conducido en la ciudad por Walter Secondino ya desarrolló algunas medidas, entre ellas la semana pasada cortaron la ruta frente a la entrada de Fábrica Militar y tienen pensado endurecer más su posición si no logran respuestas satisfactorias a sus solicitudes.
El petitorio elevado a los funcionarios a cargo de Fabricaciones tiene los siguientes puntos:
-Pase a planta permanente de los contratados.
-La firma de un convenio colectivo sectorial.
-Equiparación salarial de los trabajadores de la nueva fábrica abierta en San Juan.
Cabe recordar que en el marco de las protestas que vienen efectuando en las distintas fábricas, los sindicalistas de ATE denunciaron que el 90% de los trabajadores son contratados. “Actualmente, de los 450 que tiene FMVM, son unos 80 los de planta y están a punto de jubilarse, por lo que, de no concretarse el pase a planta, la totalidad de los compañeros serán precarizados”, afirmaron desde el sindicato liderado por Secondino.
El segundo punto que tiene en alerta a los empleados es la necesidad de un convenio sectorial, dado que actualmente están encuadrados como empleados de la administración pública y no intervienen en la negociación salarial. “Hace 20 años que luchamos por un convenio propio. Veníamos trabajando bien, logrando acuerdos parciales, pero sin el convenio específico todo queda en la nada”, explicaron.
Otro de los temas que preocupa a los trabajadores es la ley aún vigente aprobada en los años 90 y que declara a todas las fábricas militares “sujetas a privatización”.
“Nosotros hablamos el año pasado diputado por diputado y logramos que en diciembre de 2014 se le diera media sanción a la derogación de esa norma en la Cámara baja. Nos prometieron que a comienzos de este año iban a aprobarla en el Senado, pero todavía no pasó nada”, indicaron desde ATE.