La crecida del río Ctalamochita en una magnitud extraordinaria por segundo verano consecutivo dejó diversas secuelas en la ribera de Villa María y Villa Nueva.
El efecto más contundente fue la desaparición de una calle en el barrio Vista Verde. Se trata de una parte del camino que lleva hacia el puente Andino, pasando la playa conocida como “El Arenero”.
En efecto, cualquier ciudadano podía, tras atravesar la conocida playa, seguir transitando por toda la costanera hasta encontrarse con el puente ubicado en la ruta nacional 158.
Algunos areneros que se encontraban trabajando ayer, cuando EL DIARIO recorrió la zona, contaron que con la baja del Ctalamochita se detectó que el río socavó el camino de tierra y dejó totalmente interrumpido el tráfico. La erosión de la arteria fue completa: ahora el curso de agua llega hasta donde se inician los baldíos.
En la Municipalidad de Villa María están al tanto de la situación. Ayer, un vocero del Gobierno local explicó que conocen lo ocurrido y que se analizará la reparación del camino, pero a largo plazo.
“Se va a atender el asunto en su momento, por una cuestión de prioridades. Primero, se tienen que restaurar otras zonas de la costanera”, señaló el portavoz oficial ante la consulta de este matutino.
El funcionario hizo referencia al mobiliario y juegos de sectores como Palermo Bajo o Mariano Moreno, que resultaron muy castigados por el fenómeno que golpeó a las Villas por segundo año consecutivo.
De hecho, en varios tramos se puede ver a mesas y bancos caídos y hamacas o toboganes visiblemente deteriorados.
Además, desde la comuna resaltaron algo que se observa a las claras: la calle desaparecida es de escaso o nulo tráfico y tiene un mero uso de esparcimiento, sobre todo en el verano, cuando centenares de personas se vuelcan al río.
Otro dato a tener en cuenta es que ningún habitante del Vista Verde necesita pasar por esa calle para llegar a su vivienda o entrar y salir del sector.
Hay que aclarar que, a pesar de lo sucedido, se puede llegar al Andino por la orilla, tomando la costa por otro sector del barrio y no por “el Arenero”.
Un río furioso que impactó en varios campos
La histórica creciente del Ctalamochita causada por abundantes precipitaciones en toda la cuenca, causó -como se conoce- serios daños a diversos campos. Y así como en la ribera villamariense “se tragó” una calle de tierra en una zona despoblada del barrio Vista Verde, hay campos que sufrieron pérdidas de terreno, como, por ejemplo, en el que se lleva adelante el proyecto ecológico comunitario “Pueblo Mampa”.
Las fotos
1) Pozos inmensos quedaron en el camino de tierra que rodea al curso de agua, causados por la fuerza del torrente en marzo pasado. En esta zona el efecto fue mayor que en 2014
2) Así quedó interrumpida la costanera villamariense pasando la playa del barrio Vista Verde. El río vedó la posibilidad de circular