Calles donde crecí, jugué, corrí y me escondí...
¡A cuántos dije chau! Hola, ¿qué tal?, ¿cómo te va?
Mi pueblo es así, nunca cambió, aquí soy feliz.
El almacén del barrio, la calle principal, la iglesia donde
todos podemos ir a orar;
Canchitas domingueras, niños en bicicleta, la plaza,
los amigos, la municipalidad. Escuelas para todos,
hogar para el anciano... el querido hospital.
Santa Eufemia, te amo, y por nada te cambio.
Aquí crecen mis hijos, aquí he nacido yo.
La tierra de mi abuela también, la de mi vieja;
tal vez la de mis nietos, seguro así será.
Un día en tus recuerdos yo me podré guardar...
como esos días de lluvia que invitan a embarrar.
¡Santa Eufemia, te amo, y por nada te cambio!
Aquí me quedo yo porque este es mi lugar.
12/11/2007
Sonia Ranco
Alumna del CENMA Santa Eufemia.
(Nota de la Redacción: la semana pasada Sonia y otros integrantes del centro educativo visitaron las instalaciones de EL DIARIO-Cooperativa de trabajo Comunicar Ltda. y nos dejó las líneas que con mucho sentimiento plasmó y transcribimos).