Representantes de distintas instituciones de la ciudad, funcionarios, vecinos y abanderados y escoltas de las escuelas de Villa María rindieron homenaje en la mañana de ayer a los héroes locales que participaron de la dolorosa guerra de Malvinas, de cuyo inicio se cumplió en la víspera 27 años.
Elio Grandis, en representación del Centro de Veteranos de Guerra, resaltó que “hoy y siempre contamos nuestras historias para que en la conciencia quede no sólo como un acontecimiento sino como un ‘nunca más’”, en lo que fue el inicio de su discurso.
Se preguntó quién puede dejar de querer a la Patria siendo que centenares de jóvenes perdieron la vida por ella, en alusión a los chicos que murieron en el conflicto bélico del archipiélago austral, en 1982, el que selló el ocaso de la última dictadura militar.
Remarcó que de esta crisis económica que vive el mundo los países saldrán no sólo por sus recursos sino “por el espíritu y el alma del pueblo” y llamó a instalar en la juventud la “identidad nacional”, para que puedan defender a la Patria.
Grandis pidió al Gobierno nacional el reconocimiento histórico a los ex combatientes y al Gobierno de la provincia que actualice y complemente las leyes vigentes. Luego, agradeció al municipio por ayudar al Centro de Veteranos, por la asistencia psicológica.
En un día en que los argentinos siguieron conmovidos por la despedida al primer presidente democrático tras el nefasto Proceso de Reorganización Nacional (1976-1983), Raúl Alfonsín, Grandis recordó que en la primera década tras el Gobierno de facto hubo un vacío normativo, sin leyes que contengan al veterano de guerra.
No obstante, y más allá de esta advertencia, el héroe señaló que adhirieron al duelo nacional decretado por la Presidencia de la Nación a raíz del fallecimiento del líder radical.
Lo hicieron “por la trascendencia del ex presidente y por cimentar (Alfonsín) las bases para la democracia”.

Palabra del jefe comunal

Luego, habló Eduardo Accastello, quien estuvo acompañado por la diputada nacional Nora Bedano. El titular del Ejecutivo pidió un minuto de silencio y otro de aplausos, por los veteranos y también en homenaje al extinto ex presidente, quien falleció el martes.
Accastello sostuvo que en un país el equilibrio se recupera “desde la identidad, desde los valores humanos, desde la memoria activa”. “Es necesario ser el eslabón entre los padres de la Patria y los niños, hombres del futuro”, dijo.
El intendente consideró que “Malvinas y su gesta es una mirada interior de nosotros mismos, en el ejercicio reflexivo que nos hace falta para pensarnos quiénes somos y hacia dónde queremos ir”.
Destacó que los argentinos “debemos madurar nuestros actos cotidianos” y “evitar las guerras intestinas que se generan a diario, en las que no tenemos héroes ni hay muertos pero que nacen en nuestras contradicciones históricas y no permiten desarrollarnos como país”.
“Es el momento de encontrarnos”, reflexionó el primer mandatario local.
“Malvinas es un destino de encuentros”, subrayó y contó que cuando se dirigía hacia el acto, realizado en la plazoleta de bulevar Argentino y Vélez Sarsfield, le explicó a su hijo “que veníamos a ver a héroes, que caminan entre nosotros”.
Rescató la humildad de los ex combatientes y expresó su satisfacción de que recorran las escuelas de Villa María contando su experiencia.
Sobre el cierre del acto, el intendente, acompañado por el secretario de Gobierno Héctor Muñoz, el presidente del Concejo Deliberante, Javier Suppo, el presidente del Centro de Veteranos de Guerra de Malvinas, Eric Langer, familiares de héroes y el ex mandatario radical Horacio Cabezas, colocaron una ofrenda floral al pie del monumento, instante que despertó la emoción de muchos vecinos.
Descomposturas. Tres niños (dos nenas y un varón), abanderado y escoltas, se descompusieron en el acto, una característica de todos los años.
Fiscal: así fue presentado el juez René Gandarillas (¿?).