Si el incremento de la población en una localidad se relaciona con su cambio, sin lugar dudas que, durante todo el Siglo XX y lo que va del XXI, fue entre 1900 y 1914 el período de mayor transformación de Villa María. Esto ha sido tan así que de una pequeña población pasó a ser una flamante ciudad en 1915. Ese crecimiento se dio en medio de un clima político/institucional  enrarecido en la ciudad, lo que destaca el rol de la sociedad civil en el empuje de la localidad.

 

Triplicó su población

En sus primeros años de existencia Villa María vio crecer su población con rapidez. Es así que desde los pocos trabajadores que para 1867moraban en el lugar, año que se toma como el de su fundación, pasó a tener 800 habitantes para 1880. Dos décadas después, es decir cuando nació el Siglo XX la ciudad logró multiplicar su población por 3,75.  Aunque debe dejarse claro que todas estas cifras son estimaciones a partir de diferentes fuentes, porque las primeras cifras provenientes de un Censo Nacional, son las del año 1895 cuando se contabilizaron 2.215 habitantes en este pueblo.  En honor de respetar las fuentes debemos decir que la estimación de la población del año 1900 pertenece a Ricardo Podestá quien, junto a Guillermo Coria, la publicó en el libro “Villa María. Una ciudad con futuro -reseña estadística-“.

Ingresando en los datos del siglo pasado, tenemos que el período de mayor crecimiento poblacional de Villa María se dio entre 1900 y 1914. En esos 14 años la población local pasó de 3.000 a 10.248. Es decir que se multiplicó casi tres veces y media en menos de tres lustros. Luego debieron pasar 33 años para que la población local volviera a triplicarse. Fue en 1947 cuando la localidad llegó a contar con 30.362 habitantes.  A partir de allí el crecimiento poblacional se desarrolla con un ritmo diferente, así es que en 1960 la ciudad contó con 42.630 ciudadanos y dos decenios después llegó a sumar 56.830.

 

Menos que las proyecciones 

En la misma obra mencionada, publicada en 1987, Podestá proyectó que Villa María ingresaría al Siglo XXI con 73.918 habitantes. Pero el reducido ritmo de crecimiento que adquirió la ciudad hizo que no llegáramos al año 2000 con esa cifra.  Así vemos que en un informe realizado por la Universidad Nacional de Villa María, se señala que según el INDEC, en el año 2001,  la ciudad contaba con apenas 72.162 ciudadanos.  Como puede advertirse, una cifra menor a la proyectada por Podestá para una año antes de la realización del Censo. 

Por otra parte según los datos del Censo Nacional de Viviendas, Hogares y Población del año 2010, realizado por el Instituto Nacional de Estadística de Censos, Villa María alcanzó los  79.351 habitantes. Otros datos a tener en cuenta son las variaciones intercensales de las cantidades de habitantes.  Así notamos que entre 2001 y 2010 una variación intercensal del 9,96%, en tanto que entre 1960 y 1970 la variación fue de 10,37%, y para 1.980 se da una variación de 11,54%. Es decir que el crecimiento de la ciudad no recupera el ritmo de antaño. Es así que el porcentaje de variación intercensal para Villa María, entre 2001 y 2010 fue del 9,96%, por debajo del crecimiento de 10,64% que tuvo la población nacional y por encima del 7,89% que tuvo la provincia durante el mismo período. 

Como dijimos, en el período que ocupó los primeros catorce años del Siglo XX, Villa María creció a un importante ritmo que la llevó a que en 1915, el político conservador Ramón J. Cárcano, en calidad de gobernador provincial, cumpliera su promesa de campaña electoral de enviar un proyecto de ley a la Legislatura planteando la elevación de la población a la categoría de ciudad. El 18 de agosto de 1915 recibió sanción legal el proyecto que días después Cárcano promulgó como Ley 2.436. Esa norma convirtió en ciudades tanto a Villa María como a la localidad de San Francisco.

La ciudad crecía a pesar de que entre 1903 y 1913 se produjeron continuos cambios de autoridades

municipales.  Incluso recordemos que el período fue de mucha turbulencia política, basta señalar que en Villa María se produjeron acontecimientos relacionados con el proceso revolucionario de febrero de 1905. En el Tomo II del Plan de Desarrollo editado por la Biblioteca Rivadavia se dice “el adelanto urbano… - para- el que se contó con valioso aporte de la administración pública provincial, adquirió potente desarrollo, hasta dar a la población, en muchos aspectos, características de verdadera ciudad”. El historiador Bernardino Calvo, en su Historia de Villa María y sus Barrios, en relación a ese período señala “el progreso de la población se debió, durante aquellos años, solamente al esfuerzo privado, que continuó su empeñosa obra silenciosa, pero eficiente”.