Alumni comenzó ayer a tener otro volante de experiencia, con el arribo del puntano Cristian Garraza, quien propuso “trabajar y trabajar” después de su primera práctica con el plantel villamariense.
Garraza, quien proviene de Estudiantes de Río Cuarto, llegó ayer al predio “Mauro Rosales” y se puso a trabajar bajo las órdenes del entrenador Raúl Maldonado, quien espera para hoy el retorno del delantero Leandro Martínez.
“Conocía al ‘Bocha’ (Maldonado) y de ahí empezaron las negociaciones con ‘Coco’ (Agüero), después con (Sergio) Hidalgo y terminamos cerrando; se puede decir entonces que ya soy de Alumni”, comentó ayer el nuevo volante, de 29 años.
Será la primera vez que Garraza vista la roja y blanca, a la que enfrentó en contadas oportunidades, tanto sea como jugador de Juventud Unida Universitario de San Luis, por el Argentino A, como de Estudiantes, por el Argentino B. En ambos equipos fue compañero de César Ariel Quiroga, quien habló muy bien de Garraza cuando fue consultado para traerlo como refuerzo.
“A ‘Bujía’ lo conozco hace mucho, pero también a los demás chicos del club que he enfrentado en distintas ocasiones; eso es una ventaja; no empezamos realmente de cero”, expresó Garraza.
Además, recordó: “Muchas veces me tocó enfrentar a Alumni, así que conozco la cancha, la gente, más allá de que llegamos con expectativas nuevas”.
En ese sentido, habló sobre qué le sedujo de Alumni: “Tienen muchas ganas de hacer las cosas bien; además, ‘Bujía’ me dijo que hay un buen grupo. Eso me sedujo porque cuando hay un buen grupo, ayuda bastante”.
“Es un plantel joven , pero sé que tiene gente que le gusta trabajar y tanto el ‘Profe’ como el ‘Bocha’, por lo que sé, trabajan muy bien”, añadió.
En cuanto a su posición habitual en la cancha, Garraza comentó: “Con el correr de los años siempre me tocó jugar por las dos bandas; últimamente lo hice por derecha y, si me toca jugar por izquierda lo voy a hacer, aunque hace mucho que no lo hago”.
“Antes era media punta y después un técnico me empezó a bajar un poco por atrás”, reveló.
Por otra parte, el volante surgido de Estudiantes de San Luis reconoció que la zona 12, donde jugará Alumni, “es bastante complicada porque hay equipos que apuestan a otra cosa”. No obstante, indicó que “trabajando bien la pelota parada y tácticamente, se puede ayudar bastante a lo que tiene cada equipo”.
El volante habla con fundamento porque viene de jugar final y semifinal de Federal B, donde Estudiantes de Río Cuarto no pudo lograr el cometido.
“Teníamos un buen equipo, pero hay momentos donde la lógica supera todo tipo de cosas. Por eso es lindo el fútbol”, resaltó.
Por último, Garraza prometió “hacer las cosas de la mejor manera, trabajar y trabajar”.
“Cuando el técnico me necesite, hay que poder ayudar”, finalizó el volante, que para no quedar parado tras el último Argentino B, vistió la casaca de Banda Norte, en la Liga de Río Cuarto.
¿Hay más?
Tras la llegada de Garraza, Alumni terminará de definir el tema “refuerzos” en las próximas horas.
La posibilidad que llegue el delantero de Martín Porporatto, proveniente de Alem, se habría frustrado en las últimas horas, ya que el goleador tiene compromisos asumidos en el club de Villa Nueva y en Alumni los tiempos corren.
Mientras, hoy retomaría las prácticas el atacante Leandro Martínez, quien debió viajar a Buenos Aires el fin de semana, para asistir al nacimiento de su segundo hijo.
Después del amistoso disputado el domingo, ante Argentino Peñarol, el plantel de Alumni entrenó ayer con tranquilidad, en el predio del club, donde algunos hicieron tareas con pelota y otros efectuaron trabajos diferenciados.
Por la noche, el “Bocha” Maldonado viajó a Leones para ver en acción a Sarmiento (el primer rival de Alumni, el próximo 31 de mayo), que afrontó un partido oficial de la Liga Bellvillense, ante Argentino de Marcos Juárez.
“Sirve para conocer las virtudes y los defectos del rival; es una ayuda que uno expone ante los jugadores, más allá que son ellos los que resuelven en la cancha”, expresó Maldonado.