“Queremos soluciones”, dijo Fernando Páez, del Sindicato de Trabajadores de Alimentación (STIA), al informar las razones por la que suspendieron la asamblea que iban a realizar ayer en la puerta de la planta Santa Clara de Villa Nueva.
Según informaron, arribaron a esa ciudad representantes de potenciales inversores que realizaron pruebas para producir suero en polvo, lo que ampliaría las posibilidades de la planta que está produciendo al mínimo, con el riesgo que eso representa para las fuentes de trabajo.
Cabe señalar que cuando la planta estaba en manos de Nestlé, había unos 170 operarios. Hoy, con los 15 que se fueron recientemente por retiros voluntarios, quedan 75.
“Nosotros no ponemos palos en la rueda. Queremos garantizar fuentes dignas de trabajo y por eso suspendimos la asamblea de ayer, pero no abandonamos el plan de lucha”, señaló Páez.