Escribe: Juan José Coronell
Especial para EL DIARIO
En los valles de la provincia la fe recorre paisajes, para acompañarnos en la celebración del Vía Crucis. Ascender por estos cerros permite recordar los pasos de Jesús en Jerusalén.
@Valle de Punilla
Empezaremos por el cerro de La Cruz en Carlos Paz. La “Perla” de Punilla, en esta semana nos invita a conocer este cerro de 900 metros de altura por medio de 14 estaciones hechas con cemento. En la punta nos espera una cruz hecha de hormigón de 12 metros de altura, a la que se llega luego de caminar aproximadamente una hora. Construida en 1934, congrega gente durante todo el año, pero más aún el Viernes Santo. La vista del lago San Roque, de la Villa y de otras localidades es simplemente un regalo. Para subir se debe acceder por la calle Florencio Sánchez.
En La Cumbre, más precisamente en el cerro de La Viarapa, nos recibe un Cristo Redentor de nueve metros de alto, realizado de yeso y cemento. Emplazado en 1954, se llega a él luego de una caminata de unos cuarenta minutos. Desde lo alto se puede observar La Cumbre, La Falda, Capilla del Monte y espejos de agua. Con un Vía Crucis tempranero a las 7.30 de la mañana y otro por la noche, a las 21, este lugar espera como una opción ideal para disfrutar en familia.
@Valle de Calamuchita
En Santa Rosa de Calamuchita, entre lagos, vamos a poder admirar el cerro Vía Crucis, y obviamente escalarlo para que, luego de 14 estaciones de madera, lleguemos a la Cruz Mayor de ocho metros, de hierro y cemento. Al igual que los demás cerros, podemos apreciar el paisaje de Santa Rosa y los lugares más allegados. Además, en esta localidad se puede visitar las iglesias: podemos ir a la nueva o a la Capilla Vieja, donde funciona un museo que guarda todas las historias religiosas del lugar y la zona.
Mientras que en Villa del Dique y por medio de dos caminos, uno para hacerlo caminando y otro para ir con el auto, podemos llegar a la cima del cerro de la Cruz. Desde la Casa de la Cultura de la Villa, a las 18 se emprende el Vía Crucis que nos demandará una hora y cuarto de caminata. A cambio del esfuerzo físico, el paisaje y las oportunidades que nos esperan en la zona son más que atrayentes.
@Río Ceballos
En Río Ceballos tenemos la última opción del viajero. En esta localidad, el Vía Crucis se puede realizar de noche y con el color especial de las antorchas, para llegar a un Cristo imponente de 12 metros, en el cerro Ñu Porá. Alrededor de este lugar se encuentra una reserva natural que de por sí es impactante, junto con las luces de Unquillo y Córdoba haciendo de la vista una mezcla de naturaleza y urbanismo.
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