La determinación de la Dirección de Institutos Privados de Enseñanza (DIPE), en la que se establece que alumnos de escuelas con modalidad especial reciban certificados en lugar de títulos analíticos, sigue generando opiniones a nivel local.
En esta oportunidad, Nora Dutto, directora del Instituto Especial del Rosario, expresó su parecer acerca de la decisión que ha despertado polémica en el sector educativo
“La modalidad se ha dado este año y sobre esto tenemos muy poca injerencia desde las escuelas. Esas son decisiones que se toman a nivel ministerial y a nosotros se nos baja como indicaciones”, advirtió la entrevistada por EL DIARIO.
“Así como un año a nosotros nos indicaron que teníamos que entregar títulos analíticos, ahora nos dicen que deja de usarse esta forma de certificar”, acotó.
“Me parece que estamos volviendo para atrás. De todos modos, esto no lo definimos nosotros, viene impuesto y tiene que ver con las políticas educativas que se adopten”, sostuvo la directora.
“También entendemos que los ministerios de diferentes provincias certifican todos de modos distintos. En realidad, creo que está bien intentar unificar ya que todos van a atravesar por el mismo espacio, entonces es conveniente tener la misma certificación”, agregó la reporteada.
“Sería interesante que las escuelas puedan opinar en ver en qué casos se justifica determinada certificación y en cuáles no, porque hay chances para ciertos chicos que atraviesan todos los espacios curriculares y otros que en realidad les estamos dibujando las notas debido a que los alumnos no hacen, por sus posibilidades, lo que corresponde estrictamente a las materias”, opinó.
“Deberían existir diferencias ya que por ahí hacemos títulos para chicos que realmente no han cursado determinados espacios de aprendizaje”, consideró.
Autonomía para elegir
En otro tramo del diálogo sostenido con este matutino, Dutto recordó que tiempo atrás, cuando se determinó la entrega de títulos analíticos en lugar de certificados a los educandos de escuelas especiales, “también hubo polémica”.
“Lo que veíamos era que la evolución de certificado a título había significado un avance en el sentido de que teníamos una certificación con libro matriz al igual que las instituciones comunes”, manifestó la docente.
“Con esta realidad el alumno podía cambiar de escuela y seguir el protocolo al igual que en el Nivel Medio donde se va consignado todo el historial del estudiante en cada espacio curricular y avalando de este modo su actuación escolar”, anexó.
“No está mal volver a la certificación, pero considero que lo que tendría que hacerse es ver en qué caso podemos entregar un título analítico y en cuál un certificado”, manifestó la directora.
“Lo que nos está pasando es que actualmente a cada espacio curricular lo estamos llenando haciendo un gran esfuerzo para acomodar las posibilidades de alumnos severos a cada una de las disciplinas”, aclaró.
“Las adecuaciones son tan significativas que cuando pones una nota -ya que estás forzando a calificar así- carece de sentido. Es mucho más sensato un informe descriptivo donde se puntualice más las competencias y todo los que el alumno puede realmente hacer”, apuntó en otro tramo de la nota concedida a este matutino.
“La educación especial tiene que conservar su singularidad en el sentido de que nosotros tenemos que hacer una educación personalizada, individualizada, no todos los chicos tienen las mismas posibilidades de llegar a los logros como pasa en la escuela común. Creo que la certificación debe también poder reflejar eso”, reflexionó.
“Hablar de títulos analíticos no está mal, siempre y cuando no los queramos masificar, dándoles a todos este tipo de documento cuando en realidad hay casos en que no se puede”, insistió Dutto.
“Tampoco es el caso eliminar los títulos para todos, cuando sabemos que hay jóvenes que sí los pueden obtener. Opino que la escuela deberá mantener su autonomía en esta decisión”, consideró.
“Definir a quién otorgar título o certificado nos corresponde a nosotros, para eso somos especialistas y hacemos diagnósticos psicopedagógicos cuando el estudiante ingresa, esto debería valorizarse desde esta perspectiva”, expresó la titular de la institución educativa, antes de redondear: “Pero bueno, ya la decisión está tomada y nosotros no emitimos títulos, sino certificaciones”.
“Lo positivo es que podemos configurar certificados analíticos en otro sentido, es decir que son más descriptivos de las competencias y capacidades que el chico tiene para cada área que poner una noto o un numerito”, valorizó.
“Lo malo es la decisión tajante por una sola postura, o todos tienen o nadie. La educación especial debería tener la posibilidad de optar, basándose en las condiciones de logro de los chicos, evaluando trayectorias y teniendo en cuenta determinados factores”, concluyó la directiva.