El conductor desde hace 20 años de “La Mañana Compartida”, programa que se emite por radio municipal de James Craik, en el 104.9 MHz, recibe el apoyo de sus oyentes y de sus amigos y seguidores por las redes sociales. “La buena energía de la gente es increíble”, aseguró Darío Ranúcoli, quien espera un corazón para ser trasplantado. Está en la lista de Espera Evolutiva del Instituto Nacional Central Unico Coordinador de Ablación e Implante (Incucai), o sea que puede esperar sin necesidad de estar internado. Se recupera “bastante”, dijo, sometido a los cuidados y “cobijado, protegido, contenido”, tal como lo describe, en su pueblo.
El comunicador sufrió en diciembre del año pasado “una insuficiencia respiratoria” y al ser tratado derivó en “un infarto masivo en el miocardio. No podía respirar. Pero me reanimaron y al despertar me explicaron que me trajeron de vuelta”. Así lo contó y agradeció al médico Cristian Aimale y a su equipo del centro de salud craikense. Después fue trasladado al Hospital Regional Pasteur de Villa María “donde no había mucho más por hacer, pero tras varios días y a partir de algunos contactos me consiguieron un lugar en el Hospital Córdoba”. “Pasé por coma farmacológico y me recuperé tras varias semanas para someterme a varios estudios que indican que mi corazón está dañado y funciona en un 36%, pero estuvo por el 20%”, detalló.
Además, indicó que los médicos estiman que al estar averiadas la vía troncal y la aurícula derecha, entre otras, “todas se podrían operar, pero el músculo está destrozado... sería como regar una planta seca”.
Antecedente
Pero la historia de Darío se remonta a 2006, cuando debió someterse a un autotrasplante de médula al sufrir de linfoma Hodgkin, un cáncer que se origina en los glóbulos blancos, llamados linfocitos (los linfocitos son parte del sistema inmunológico). “Después me recuperé, de a poco, porque se me habían caído las defensas”, contó. Es que además, es donante desde el año 2000 y ha manifestado en muchas oportunidades “lo importante que es donar”. “Es único tener hoy enfrente gente que te diga que es necesario ser donante”, narró.
Preparado
“Me preparo para cuando llegue el nuevo corazón y me pueda recuperar, salir adelante”, dijo el comunicador sobre esta instancia de espera. Mientras, días atrás volvió a la radio, en pos de “buscar cosas que me aferren a la vida, donde me siento útil”. “Se me frustraron varios proyectos, que espero concretar tras el trasplante”, auguró.
Además valoró “todo el apoyo que recibía a través de distintos medios, redes sociales, cadenas de oración... Me conocían del medio, pero además me manifestaron cariño, lo que se convierte en un factor de contención increíble”.
Sin cobertura médica
“Imagino cuántos pacientes tendrán que peregrinar golpeando puertas... Yo pude acceder por contactos”, dijo Darío al ser consultado sobre la atención recibida en el ámbito público y en parte en clínicas privadas.
Es que Ranúcoli necesita completar un estudio para el Incucai y espera en los próximos días concretarlo en la Clínica de Especialidades de la ciudad de Villa María. Este chequeo que le resta estaba previsto que se lo realizaran en el Hospital San Roque de Córdoba capital, pero el turno brindado tenía fecha recién para septiembre, por lo que “a través del área de Desarrollo Social del municipio de James Craik, a valores de nosocomio público, accederá al centro de salud de calle Corrientes.
Mañana Ranúcoli tendrá una nueva consulta con la médica Clara Huerta, del área de Trasplantes del Hospital Córdoba y que “cuenta con un equipo prestigioso”, describió. Y espera que en alrededor de dos meses pueda tener un nuevo corazón, “para salir de ésta y devolver todo el cariño a la gente que me expresó su apoyo en estos días, pero también en volver a marcarle a cada uno la importancia de ser donante de órganos”, concluyó.