Proteccionistas locales armaron una fan page en Facebook denominada “Libre arg”, a través de la cual solicitan a los candidatos de todos los partidos de las dos Villas que incluyan entre sus propuestas de gobierno un apartado a través del cual se contemple la eliminación de los carros tirados por caballos.

En ese sitio publicaron varias noticias que dan cuenta de cómo se instrumentaron medidas de ese tipo para suplantar la tracción a sangre por motovehículos.

Guaymallén, en Mendoza, y Paraná, en Entre Ríos, son apenas dos muestras de cómo fue posible “mandar a descansar a los animales” a través de una planificación de esos estados municipales de la Argentina. Pero también incluyeron ejemplos de otros países, como Paraguay, donde se aplicaron políticas semejantes.

 

Ejemplo de cómo se hace

En la ciudad litoraleña, por ejemplo, la iniciativa comenzó a fines de 2013, cuando se entregaron los primeros nueve motocarros. 

Un año más tarde, en diciembre de 2014 se puso en marcha la segunda etapa con la entrega de otros tantos motovehículos, los cuales son pagados en cuotas por aquellos que ingresaron al “canje” y los animales fueron recuperados físicamente y destinados, en algunos casos, a centros públicos y privados de equinoterapia y otros pasaron a manos de ciudadanos que se anotaron en un registro de voluntarios para la tenencia.

A cada uno de los trabajadores que usaban al caballo para realizar sus tareas se le entregó un motocarro, pero también el carné de conducir subsidiado y, para el caso de los cartoneros, la libreta sanitaria y los certificados de las capacitaciones a las que asistieron como parte del trabajo integral que realizan.

Ahora, los candidatos en Villa María y Villa Nueva ya lo saben. Sólo resta que lo analicen y expresen si están de acuerdo en instrumentarlo.