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Pablo Luna Broggi

Universitario aseguró el pasaje a los play off como segundo en su grupo, algo complicado de pensar hace algunas semanas cuando la clasificación tambaleaba. El “Catania cordobés” fue más que su rival y mereció el triunfo, pero nadie lo esperaba tras el agónico empate de Unión Central.

El partido comenzó con una intensidad de juego demasiada baja por parte de ambos equipos. El primero que se animó a tirar a portería fue Yamil Elhall, pero el potente remate del lateral izquierdo de la “U” se elevó demasiado. Posteriormente, César Contreras probó suerte desde larga distancia, pero el disparo se fue desviado.

Llegando a los diez minutos, Universitario comenzaba a marcar una leve superioridad frente a su rival y  a llegar con más peligro y frecuencia hacia el arco de Morales.

Por el lado de Unión: nada. Solo Rodrigo Solís intentaba recalar posiciones desde mitad de cancha y generar opciones de gol, pero los ataques no llegaban a buen puerto.

El pitazo de José Díaz marcando el final de la primera mitad llegó entre miles de bostezos que evidenciaban lo aburrido que habían sido los primeros 45 minutos.

El complemento se inició con un cabezazo de Carlos Jacobi, que se fue muy cerca del palo izquierdo del arco rival. Universitario estaba dispuesto a plasmar su superioridad en el marcador y lo lograría rápidamente: Leonel Fassi no dudó y remató desde la puerta del área con potencia, dejando sin reacción a Morales y rompiendo la paridad con justicia. Luego, Jacobi anotaba el 2 a 0, pero la conversión fue anulada por posición adelantada.

El equipo de calle Rucci no tenía reacción, estaba perdido y casi resignado. A todo esto, la situación del Aurinegro de no jugar por nada no ayudaba en lo más mínimo. Sin embargo, la mágica zurda de Zabala casi emparda el tanteador con un sutil remate de tiro libre al ángulo, que Simón Mellano se encargó de desviar con una gran volada.

El conjunto dirigido por Joselito Bernadó jugaba muy tranquilo, porque ganaba sin hacer demasiado y el rival no lo inquietaba. Lo único negativo fue la lesión de Cristian Fernández que justamente ingresó para suplantar al lesionado Leonel Fassi, y diez minutos después se resintió de una molestia acarreada de la fecha pasada y debió salir: en su remplazo entró Rivera, clave en la última jugada del partido.

Unión iba en busca de la paridad, pero no podía hilvanar ni dos pases seguidos. Sin embargo, siempre hay un oasis en medio del desierto y el histórico equipo villamariense consiguió el utópico empate. Un desesperado centro del arquero Morales desde la mitad de cancha que logró peinar Reynoso le posibilitó a Cabrera marcar el ansiado 1 a 1 cuando el reloj marcaba los 47 minutos del segundo tiempo.

Unión aún festejaba el agónico empate cuando el atrevido juvenil Rivera sacó del medio y comenzó a encarar a los jugadores rivales que lo debieron derribar a metros del área grande. El árbitro José Díaz marcó tiro libre y posteriormente penal tras un supuesto agarrón dentro del área de Ezequiel Porta. Todo el equipo local protestó la decisión del juez, pero no pudieron evitar el gol de Emmanuel Prato que sin titubear decretó el 2 a 1 final.

 

La figura