Villa Nueva tuvo anoche una notoria movilización ciudadana despojada de banderas partidarias, que nació de las redes sociales y que apuntó a una sola cuestión: mayor seguridad para los habitantes.
Desde cerca de las 21, la plaza Capitán de los Andes albergó a más de un centenar de personas que luego expusieron su preocupación por la sucesión de hechos delictivos de los que vienen siendo víctimas y que se acentuaron notablemente en las últimas semanas.
El primero en hablar con un micrófono fue Lisandro, el joven que impulsó la concentración desde Facebook. Explicó que sólo fue quien sugirió el encuentro y recalcó que el espíritu de la reunión era pacífico y apartidario. También remarcó que los agentes policiales son sólo trabajadores, que la cuestión no les compete a ellos, sino a quienes toman decisiones.
Le siguió la jueza de Paz María Ester Farías, quien al ver a la ciudadanía salió de la sede del Juzgado para hablar. En un crudo discurso, precisó que la Comisaría sólo tiene un móvil con el que se debe atender las numerosas cuestiones que le competen a la fuerza. Admitiendo las quejas de la gente, dijo que “con un solo sumariante para recibir todo tipo de denuncias no se puede”.
La funcionaria valoró la unión ciudadana: “En 34 años nunca vi esto”, expresó y añadió que esta puede ser una de las maneras para que los gobernantes se sientan obligados a destinar herramientas para atender la problemática.
También advirtió que los patrulleros que se veían anoche en inmediaciones de la plaza llegaron a raíz de la movilización, pero que no están disponibles diariamente. Igual circunstancia advirtieron los presentes.
Luego un expolicía lamentó lo que viene ocurriendo mientras los vecinos fueron pidiendo la presencia del intendente Guillermo Cavagnero y entonces se encendieron los reclamos a viva voz por la ausencia del jefe comunal. “Que dé la cara”, gritaron varios entre aplausos de los demás.
En ese marco, un grupo cruzó la calle Marcos Juárez para hacer entrega de un petitorio en el que se demandan recursos, autonomía de la Comisaría local, patrullajes “de manera responsable, donde la detención de las personas no se realice sin fundamento alguno”, creación de una unidad judicial con personal fijo y herramientas, reparación de luminarias y mayor iluminación, entre otros puntos.
Hubo que esperar diez minutos para que efectivos informaran que se iba a recibir una sola persona. Pasó una mujer, quien al salir dijo que “no se pudieron comunicar por teléfono con el comisario” y no hubo respuestas.
Quienes hablaron con EL DIARIO contaron que se vienen sucediendo episodios como arrebatos, robos de motos y robos en comercios y hogares. “En mi barrio los comerciantes ahora atienden con la puerta con llave desde las 19”, dijo una señora.
Lo que se recogió es que muchos pierden objetos que no son de alto valor económico pero imprescindibles para quienes viven con lo justo: una garrafa de gas, una sillita para bebé o una bicicleta que se usa para trabajar, aunque también hubo asaltos a mano armada.
Al final se resolvió que el lunes irán al Concejo Deliberante a las 20.30 y se comprometieron a sumar vecinos para lo que será la segunda concentración.