En el lugar donde se formaron profesionalmente como enfermeras, las veteranas de guerra de la Fuerza Aérea Stella Maris Botta, Stella Maris Morales y Mónica Rosa recibieron un emotivo homenaje durante la jornada de ayer.

Coincidiendo con la celebración del Día de la Afirmación de los Derechos Argentinos sobre las Islas Malvinas, Georgias del Sur y Sandwich del Sur y los Espacios Marítimos Circundantes, se llevó a cabo en el Salón de Actos del Instituto del Rosario, que sirve de sede a la Escuela de Enfermería “Cecilia Grierson”, el acto en honor de las heroínas que estudiaron en Villa María.

“Hace dos años el Gobierno de la Nación las distinguió por su actuación durante el conflicto, ahora nosotros quisimos ser las reconocedoras del compromiso que demostraron en aquellos momentos difíciles”, expresó la coordinadora de la escuela de enfermería, Cristina Quinteros.

“Además de poder apreciar las experiencias de cada una, la idea de este encuentro era homenajearlas con una placa recordatoria en la institución”, acotó la coordinadora de la casa de estudios.

Cabe señalar que durante el evento se pudieron escuchar las expresiones de la directora del Profesorado Gabriela Mistral, Sonia Rivera, y la reflexión de la docente-instructora jubilada, Nelvis Fuentes.

También hubo espacio para entrega de recordatorios a las valientes enfermeras y un momento donde Botta, Morales y Rosa luego de repasar sus vivencias contestaron preguntas que formularon los asistentes al encuentro.

 

Orgullosas y emocionadas

“Nos sentimos orgullosas y felices por este reconocimiento, era algo que esperábamos de nuestra escuela, el lugar donde nos formamos en valores y aprendimos todo lo que aplicamos profesionalmente en el conflicto”, manifestó Stella Maris Botta en diálogo con EL DIARIO.

Visiblemente emocionada al igual que sus compañeras, Stella Maris Morales agradeció “eternamente” la distinción que la ciudad (tras el acto en las Rosarinas, las enfermeras fueron recibidas y galardonadas en el Concejo Deliberante de Villa María) y la institución les ofrecieron en la víspera.

“Los recuerdos son dolorosos y lo que compartimos, más allá de detalles propios de nuestra labor, tiene que ver con el cómo vivimos aquella situación de guerra”, agregó la reporteada.

“Ante otras personas hablamos de la situación psicológica que nos tocó vivir y la contención que tuvimos que pasar para contener a los soldados que venían heridos”, redondeó para cerrar.

En tanto, Morales aseguró que lo que la marcó y dejó realmente muy triste fue una situación “muy fea” que experimentó.

“Vino uno de los conscriptos, un soldadito, vino al hospital y en ese momento él no se había dado cuenta de que le faltaba una pierna. Cuando levantó las sábanas y se observó comenzó a gritar y pedir por Dios y su mamá. Eso me dejó una marca que aún hoy siento”, subrayó.

“Siento un dolor tremendo por no haber podido hacer nada en ese momento, sólo contenerlo con la poca experiencia que en aquel momento teníamos”, concluyó.

Vale destacar que las enfermeras villamarienses se desempeñaron durante todo el conflicto en un hospital “móvil o reubicable” de la Fuerza Aérea Argentina.

 

Los ediles también

En una sesión especial que se realizó en el Concejo Deliberante también se distinguió a las tres villamarienses que, como enfermeras, participaron en la Guerra de Malvinas.

Las homenajeadas recibieron de mano del presidente del Concejo Deliberante, José Escamilla, y de sus pares, certificados y una placa recordatoria.

Cabe señalar que en la sesión, los ediles aprobaron un proyecto de ordenanza distinguiendo a las mencionadas por su “desempeño heroico, valentía y compromiso social”.

Entre los fundamentos se destaca que con la iniciativa no sólo se rinde homenaje a estas mujeres de la ciudad, sino también a todas quienes participaron del conflicto.

En el proyecto se señala como fundamental eliminar el anonimato de aquellas mujeres que, con valor, realizaron tareas de salvataje y apoyo poniendo en riesgo sus vidas. La mayoría de ellas fueron enfermeras e instrumentadoras quirúrgicas civiles, viviendo los horrores de la guerra desde adentro: recibiendo en el continente o en los buques transformados en hospitales a los soldados heridos y psicológicamente agobiados.