María Virginia Miguel Carmona asumió como fiscal federal subrogante en Villa María el 5 de febrero de 2013, remplazando a Carlos Facundo Trotta, quien fue designado en Córdoba. El lunes último, la abogada bellvillense puso fin a su etapa en esta ciudad, cuando juró ante la procuradora General de la Nación, Alejandra Gils Carbó, como titular de la Fiscalía Federal de Primera Instancia de Esquel, Chubut.
Ayer, en diálogo telefónico con este medio, la funcionaria judicial habló desde Esquel, donde está tomando los primeros contactos con la comunidad. “De todas maneras, recién voy a asumir mis funciones cuando termine la causa de La Perla, dado que somos tres fiscales los que en agosto o septiembre debemos comenzar con los alegatos”, indicó.
Estima que esa megacausa podría concluir con las sentencias poco antes de fin de año, por lo que recién en 2016 iniciará su actividad como fiscal en esa ciudad del sur argentino. “Pero ya no vuelvo a Villa María”, dijo la fiscal, informando que desde anteayer está al frente de esta Fiscalía María Marta Schianni, quien fue merituada en el correspondiente concurso y tuvo el aval del Senado de la Nación para ser designada.
“Acá hay otra problemática, está muy fuerte la cuestión de los derechos de los pueblos originarios, los incendios y, lamentablemente también, la trata de personas”, dijo, refiriéndose a la realidad de Esquel.
Buzón y trata
Repasando la actividad que tuvo en Villa María desde febrero de 2013 a la actualidad, es de destacar la implementación de un buzón de denuncias anónimas que se puso en marcha para que se pudieran dar a conocer casos de explotación sexual y laboral en agosto de 2013. Aún hoy, siguen haciendo procedimientos contra la trata de personas originados en las denuncias que se presentan en ese buzón.
También estuvo al frente de varios operativos contra la explotación laboral. El último que trascendió fue el de los trabajadores bolivianos que se desempeñan y viven en los cortaderos de ladrillos de la ruta 9, en el acceso sur de Villa María.
No faltaron temas vinculados a delitos económicos que se investigaron desde la Fiscalía Federal de esta ciudad, como evasión fiscal y venta de facturas “truchas”. También debió investigar tragedias como la explosión en la central eléctrica de Pilar y otros delitos, como el robo de pólvora en la Fábrica Militar.