La Ingeniería Agronómica de la Universidad Nacional de Villa María (UNVM) es la única del país que no tiene el aval académico de la Comisión Nacional de Evaluación y Acreditación Universitaria (Coneau), dado que no cumplía con los parámetros exigidos de horas cátedra y contenidos. Esa situación, le valió el mote de “la oveja negra” de las carreras agronómicas.
Para poner fin a esa situación que lleva años de tenso debate entre la ESIL (donde se dicta la Tecnicatura en Agronomía) y la UNVM (en la que se completa el cursado para obtener el título de grado); en diciembre del año pasado se conformó una comisión bipartita que trabajó con la coordinación de la Secretaría Académica de la casa de altos estudios.
Finalmente, llegaron a un acuerdo y elaboraron un nuevo plan de estudios que ayer fue aprobado por el Consejo Directivo de Básicas y se estima que el miércoles próximo, lo aprobará sobre tablas el Consejo Superior de la Universidad.
“El nuevo plan parte de un concepto de unidad funcional, es decir, que habrá un grupo de materias en los tres primeros años, que se dictarán de manera conjunta entre la ESIL y la UNVM, con profesores de ambas instituciones”, explicó Germán Cassetta, decano del Instituto de Básicas.
Tendrá una duración global de cinco años, un total de 65 materias con las que completarán 4.416 horas cátedra.
“Si todo sale como estimamos, el año próximo, los alumnos que deseen estudiar Agronomía, van a inscribirse en la Universidad y en la ESIL y tendrán dos libretas. Cada año de esos tres primeros, habrá materias que se dicten sólo en la Universidad, otras sólo en la ESIL y otras de manera conjunta, con profesores de ambas instituciones trabajando sobre un mismo programa consensuado”, explicó.
Las materias de la ESIL son las que no están en las exigencias de la Coneau.
La historia
No es la primera vez que el Consejo Directivo de Básicas aprueba el nuevo plan para Agronomía. En abril de 2014, habían llegado a un acuerdo que después del aval de la Universidad, no pudo prosperar porque las autoridades de la Escuela de Lechería no estaban conformes con el resultado.
Por esa razón, en diciembre de 2014, Cecilia Conci y Orlando Pfaffen, por la UNVM y la ESIL respectivamente, firmaron un nuevo acuerdo por el cual quedaba conformada la comisión que se comprometía a elaborar otro plan de estudios.
Así fue que se pusieron a trabajar en el diseño del nuevo programa José Romano, Gustavo Fernández, Marcelo Bonino y Hernán Alassia por la escuela terciaria y Gustavo Bitar Tachi, Natalia Tacone y Otto Wester, por la Universidad.
El proyecto que consensuaron fue el que aprobó ayer el Consejo Directivo.
En octubre, lo elevarán a la Coneau para ver si lo aprueban. “Ya estuvimos hablando y nos remarcaron que si tiene los parámetros establecidos para acreditar las carreras de Agronomía, no va a haber escollos para su aprobación
El costo
Con este acuerdo, los alumnos que deseen hacer la carrera de Agronomía, deberán ser estudiantes de la ESIL y como esta institución es privada, deberán abonar la cuota fijada por la prestigiosa escuela.
“Como Universidad, asumimos el compromiso de que nadie quede afuera por cuestiones económicas, por lo que vamos a trabajar a través del sistema de becas para que puedan afrontar los costos de las cuotas”, señaló.
En lo personal. Casseta señaló que el trabajo que llevó adelante en estos casi dos años que está al frente de Básicas, lo hicieron tomando como ejes tres palabras: “Paciencia, perseverancia y decisión. Tuvimos paciencia cuando parecía que no avanzaba, perseverancia para seguir adelante y la decisión de que la Agronomía de la UNVM deje de ser la oveja negra”, concluyó.
