En una ciudad sin colegios humanistas ni tradición clásica que se precie, que un reducido grupo de profesores y alumnos haya logrado publicar ocho libros en menos de siete años es, por lo menos, una noticia digna de mención y de orgullo. Y por otro lado, casi a contramano del culto por lo efímero que vivimos en esta “posmodernidad global” (donde se ha hecho un culto de la juventud y de aquel despreocupado “todo pasa”) que ese grupo de profesores haya hundido las narices en los textos que han configurado la concepción filosófica y religiosa de Occidente, ha colocado a la UNVM en un sitio de privilegio. De otro modo no se explica que la casa de altos estudios de nuestra ciudad haya sido elegida “sede” del Segundo Congreso Internacional de Retórica que se llevó a cabo por estos días en el Campus.
Pero volviendo al libro que nos compete, se trata al decir del doctor Alfredo Fraschini (director del Centro Filológico) de “un proyecto donde estamos trabajando textos patrísticos griegos y latinos escritos entre los siglos IV y IX. La mayoría no ha sido traducido al español, pero hay versiones en otros idiomas que nos sirven de apoyo. Se trata de ediciones antiguas en inglés, francés o italiano”.
Sin embargo, a pesar del rigor filológico de la tarea, Fraschini señala que “nuestro mayor interés es que esos libros no se queden en la academia, sino que lleguen a la gente. Por eso hacemos una edición actualizada. Nos preocupamos, sobre todo, de la fuente griega y cómo es que la pasaron al latín, que por ese entonces no tenía un vocabulario filosófico adecuado; ya que la patrística, si bien es eminentemente teológica, le debe su vocabulario a la filosofía griega”.
Sobre los Sermones y una montaña de citas
En una coedición entre Editorial Docencia de Buenos Aires y la UNVM, Sermones es un libro de 230 páginas (el octavo que se publica desde el CF) que reproduce el Discurso sobre los difuntos (De mortuis) de Gregorio de Nisa y la Homilía sobre el prólogo del Santo Evangelio de Juan, de Escoto Eriúgena. La traducción del griego del discurso así como sus comentarios estuvo a cargo del magíster Carlos Blanch, mientras que el doctor Fraschini hizo lo propio con la homilía.
“En el Centro Filológico tenemos el trabajo repartido y mientras Carlos Blanch trabaja sobre los padres griegos, yo lo hago sobre los padres latinos. Juan Pablo Abraham nos ayuda en las traducciones y Lidia Moreira y Cristian Cabrera se ocupan de buscar las fuentes”.
En cuanto al proyecto de libro que se viene, Fraschini comenta que “ya está en marcha y se tata de una edición crítica de La división de la Naturaleza de Juan Escoto Eriúgena. Allí comentaremos todas las citas y las remitiremos en apéndices a la fuente original. Se trata de cinco libros en donde hay muchas citas de San Agustín, de Dionisio Areopagita y de Máximo Confesor; pero también de los filósofos paganos como Platón, Aristóteles y Cicerón. En el libro primero, para que te des una idea, hay más de 300 citas. Así que el apéndice va a superar ampliamente el texto original”.
En cuanto al mayor desafío que impone esta traducción, el doctor comenta que “sin dudas pasa por actualizar las citas y los datos de padres que no se han hecho muy famosos, como es el caso de los italianos San Ambrosio o San Gregorio Magno. Pero nuestro desafío principal es hacer que el texto sea lo más fiel posible al lector de hoy y ponerlo a su alcance”.