La jueza de Control de los Tribunales de Villa María, Edith Lezama de Pereyra, sobreseyó definitivamente a un vecino de Tío Pujio que fue acusado de haber violado a una chica de 14 años, hecho por el que estuvo detenido 307 días.

A través de la Sentencia Nº 133, dictada el pasado lunes, la magistrada resolvió sobreseer totalmente a Leonel Alejandro Campregher de los delitos de “abuso sexual con acceso carnal” y “privación ilegítima de la libertad agravada”, en relación a un episodio que había sido denunciado el 29 de enero de 2012 en la vecina localidad.

Así lo informó ayer a EL DIARIO el abogado Lisandro Caronni, quien junto a su padre Luis ejerció la Defensa de Campregher durante el largo proceso penal que se inició el 29 de enero de 2012, cuando se radicó la denuncia en el Destacamento policial de Tío Pujio.

“Después de casi tres años y medio de investigación, la Justicia comprobó la falsedad de los hechos denunciados y decidió darle la razón al imputado, desvinculándolo totalmente de la causa”, señaló Caronni (h).

El joven letrado villamariense destacó que “el hecho se resolvió durante la etapa de la investigación penal, es decir que tanto la jueza de Control como el fiscal instructor (Gustavo Atienza), entendieron innecesario realizar el juicio oral”.

“Estamos conformes con la decisión de la Justicia, ya que después de mucho tiempo de trabajo y luego de una larga investigación, concluyó que correspondía sobreseer a Campregher”, se explayó Caronni, y añadió que “desde la Defensa esperamos que esta resolución ayude a reivindicar socialmente a quien estuvo 10 meses con prisión preventiva, sobre todo teniéndose en cuenta que el lugar donde vive es una población de pocos habitantes”.

El codefensor del albañil precisó que fue el fiscal Atienza quien solicitó formalmente el desprocesamiento, aunque fue la jueza Lezama de Pereyra quien terminó resolviendo la cuestión.

 

Diez meses preso

Leonel Campregher, de 28 años (8 de junio de 1987) y domiciliado en Tío Pujio, fue detenido el 18 de abril de 2012 y recuperó la libertad el 19 de febrero del año siguiente, es decir que estuvo preso exactamente 307 días.

Y fue la jueza de Control quien le concedió la libertad luego de establecer una fianza o caución personal de 50 mil pesos, por la que respondieron con sus firmas los abogados defensores.

Cabe señalar que el más grave de los delitos que le atribuyó el fiscal Atienza, el “abuso sexual con acceso carnal”, es legislado por el artículo 119 del Código Penal de la Nación y tiene una pena que va de los seis a los 15 años de prisión.

Once días antes de recuperar la libertad, los Caronni presentaron un escrito solicitando el cese de la prisión preventiva, al que la jueza Lezama hizo lugar tras fijar la garantía procesal antes mencionada.

 

Se elevó a juicio

E 25 de marzo de ese mismo 2013, es decir apenas cinco semanas después que Campregher fuera excarcelado, el fiscal Atienza concluyó la investigación y dictó la requisitoria de elevación a juicio, imputando al albañil como supuesto autor de “privación ilegítima de la libertad agravada” y “abuso sexual con acceso carnal”.

El funcionario judicial concluyó así que existían pruebas más que suficientes como para solicitar el enjuiciamiento del trabajador tiopujiense.

Sin embargo, 10 días después los codefensores se opusieron a la elevación a juicio de la causa, por lo que tuvo que resolver el diferendo la jueza de Control, quien en una nueva instancia confirmó la medida dictada por Atienza.

Los Caronni apelaron el fallo, ante lo cual el expediente fue remitido a la Cámara del Crimen de Río Tercero, que habitualmente interviene como Cámara de Acusación en circunstancias de esta naturaleza.

Y fue el tribunal riotercerense el que, tiempo después, dictó la “falta de mérito” de Campregher en el hecho investigado, luego de considerar que no había elementos de prueba como para que fuera juzgado, pero tampoco como para sobreseerlo definitivamente.

La causa volvió a Villa María, más precisamente a la Fiscalía a cargo de Atienza, quien al no obtener nuevos elementos de prueba que comprometieran al acusado, decidió solicitar su sobreseimiento a la jueza Lezama de Pereyra.

 

La grave denuncia

El hecho por el que fue procesado y detenido al albañil -según la denuncia- se habría producido la noche del domingo 29 de enero de 2012, cuando la menor en cuestión (por entonces de 14 años) se dirigía en bicicleta desde la casa de su abuelo materno a lo de una compañera de colegio, a buscar una carpeta. Según se denunció ese mismo día en el Destacamento tiopujiense, alrededor de las 21.30 la adolescente fue encerrada por una vieja camioneta Chevrolet conducida por Campregher, que hizo que la ciclista perdiera el equilibrio y cayera al suelo. Luego habría sido tomada por la espalda y, amenazada con un cuchillo, obligada a subir a la pick up.

Siempre de acuerdo con la grave denuncia ratificada posteriormente en la Justicia, la jovencita fue llevada hasta la calle Buenos Aires, frente a una fábrica de cuajo, una zona de monte que se encuentra al oeste de Tío Pujio, donde en el interior de la cabina de la Chevrolet, se habría producido la violación: “¡Sacate la ropa!”, fue la amenaza proferida, mientras el cuchillo estaba apoyado sobre el cuello de la menor, y tras cartón la sometió vaginal y analmente.

Según obra en el expediente, la adolescente se resistió, pero no pudo evitar el ultraje. Y cuando todo concluyó, ya cerca de las 22, el agresor lanzó una advertencia: “¡Si gritás o hacés la denuncia, voy a matar a tu mamá y a tu hermanito!”.

La denunciante agregó que Campregher se alejó del lugar en su camioneta, dejando abandonada a su víctima, quien regresó corriendo hasta donde había quedado su bicicleta, y con ella se dirigió hasta la casa de su abuelo, donde llegó llorando y dio su relato.