Emblema de nuestro país, la Casa Rosada se encuentra ubicada en el corazón de Buenos Aires, con el río de la Plata a las espaldas y rodeada de otros íconos de fuste como la plaza de Mayo, el Cabildo o la Catedral Metropolitana. Desde esa posición privilegiada irradia belleza a partir de su estilo ecléctico y sensaciones de poder debido a su función primordial: la de ser sede de la Presidencia de la Nación desde el año 1862 a la fecha. Abierto al público a través de visitas guiadas gratuitas, el palacio está repleto de rincones de enorme esplendor y valor simbólico.
Lo mejor será empezar el recorrido bien de abajo, por el subsuelo. En este sector habita el Salón de los Pintores y Pinturas Argentinas del Bicentenario, que muestra trabajos hechos por algunos de los artistas más destacados de la Patria. La Escalera Carpani, reliquia en mármol, conecta con la planta baja.
Ya a la altura de la calle, el lugar despliega algunos de sus tesoros mejor conservados. En ese sentido, cabe subrayar al célebre Patio de Honor o “de Las Palmeras” (con sus arcos de galería, su fuente y sus palmeras yatay, autóctonas de la provincia de Entre Ríos), el Patio Malvinas (original del 1873), el Patio del Aljibe, la Galería de los Patriotas Latinoamericanos (homenaje a distintos héroes nacionales de nuestro continente), y el Salón de los Bustos o “Hall de Honor” (majestuosa sección de columnas y finos mármoles por donde ingresan los funcionarios de la Presidencia e invitados, y que conserva los bustos de todos los presidentes argentinos).
Primer piso y museo
En el primer piso los espacios comunes no hacen más que potenciar lo visto hasta ahora. A esta planta se accede a través de las escaleras Italia y Francia, que en sí mismas son sinónimo de distinción. Toda el área continúa haciendo hincapié en los detalles italianizantes, fundamentalmente con lugares como el Salón Blanco (de exquisita figura, en él se desarrollan algunos de los actos oficiales de mayor trascendencia), los salones Sur y Norte, el Salón de las Mujeres Argentinas (que rinden tributo a aquellas mujeres que marcaron una época en Argentina: Eva Perón, Juana Azurduy, Mariquita Sánchez de Thompson y las madres de Plaza de Mayo, entre muchas otras) y el Salón de los Científicos Argentinos (que hace lo propio con figuras de la ciencia de la talla de César Milstein, Florentino Ameghino, Bernardo Houssay, Perito Francisco Moreno y René Favaloro).
Finalmente, aparece El Museo del Bicentenario, ubicado en dependencias contiguas a la Casa Rosada, y que tiene una entrada separada. El impresionante emprendimiento (inaugurado en 2011), transporta al visitante en un periplo de dos siglos de historia nacional, de la mano de objetos que definen la línea de vida del palacio y de sus antiguos “moradores”, así como del otrora Fuerte de Buenos Aires (fines del Siglo XVI) y de la Aduana Taylor (mediados del XIX), los cuales también aquí funcionaran.
DONDE
Buenos Aires
CUANDO
Sábados, domingos y feriados, de 10 a 18 horas.