Para Andrés Ferrero (foto), quien ya hace varios años es titular indiscutido en la Primera de Yrigoyen pese a sus jóvenes 22 años, es “inevitable” la ansiedad de empezar a jugar la final y remarcó que “es una necesidad poder lograr el título”.
Es que, en lo personal, Ferrero todavía “tiene la espina” de la final perdida en 2011 con Universitario y, además, porque tiene otra oportunidad de estar en una final, le es gratificante en su interior a raíz del esfuerzo que realiza en los últimos años para estar siempre en plenitud partido a partido.
Al estudiar en Córdoba, Ferrero en el transcurso de la semana entrena en soledad y recién los viernes a la noche se integra al grupo de trabajo que comanda Germán Vicario, a quien le está muy agradecido: “Me crié futbolísticamente con él (por Vicario), me enseñó muchísimo, te brinda mucha confianza y siempre trata de lograr lo mejor de nosotros”.
En ese sentido, el aprecio es mutuo porque el propio Vicario también fue elogioso con el lateral derecho, a quien considera un jugador para “otra categoría”, según expresó en una radio local.
Volviendo a las sensaciones previas a la primera final, el defensor -quien resaltó que lo “favoreció ser constante en una posición”- explicó que “es inevitable no estar ansioso en una instancia como ésta. Más que vamos a enfrentar a Alem y en un marco como es la ‘Placita’”.
A continuación, fundamentó que Yrigoyen llegó a la final “porque siempre hubo un objetivo claro en la cabeza. Y agregado a eso mantuvimos la humildad, mostramos muchas ganas de llegar hasta esta definición y siempre respetando el trabajo y una idea. Todo eso fue primordial”.
Yrigoyen, en tanto, en los cruces de cuartos de final y semifinales fue el único equipo que no recibió goles. “Es algo muy valioso ese punto. Realmente nos hicimos muy fuertes atrás y es una ventaja porque es importante que no nos conviertan porque arriba siempre logramos marcarle al rival”, comentó.
De Alem, tras la consulta, Ferrero describió: “No lo hemos enfrentado, pero Alem siempre es Alem y en estas instancias se hace muy fuerte. Además, es un equipo que se formó para un Provincial y tiene jugadores de mucha categoría”.
“Igualmente -agregó- una final es una final y ambos equipos vamos a dejar todo. Nosotros también tenemos jugadores de experiencia y, principalmente, muchas ganas de lograr el objetivo”.
En cuanto al partido de mañana, el lateral derecho dijo que “sería ideal lograr un triunfo por como se armó la serie. La premisa es hacerse fuerte en los dos partidos, tratar de ganar los dos partidos y no forzar una serie a una tercera final”.
Ferrero, por su parte, le pidió a los hinchas de los “Diablos Rojos” que “vayan a la cancha porque, más que todo, esperemos que se vea un gran espectáculo y que disfruten esta posibilidad de que el club está jugando una nueva final. Y, por supuesto, que nos apoyen porque lo vamos a necesitar”.
“El objetivo es poner al club donde debe y merece estar. Por lo que no hay que sentir la ‘presión’ de ganar un torneo, sino afrontar la final orgullosos de estar en este lugar y que todo se logró fruto del trabajo”, cerró.
El dato
Con Pauletti: para mañana, Yrigoyen contará con el retorno del arquero David Pauletti, quien se perdió los dos juegos de semifinales y parte de los cuartos de final por una lesión muscular. Además, también estaría disponible el atacante Richard Brusa, quien se perdió la semifinal por una lesión, y volverá a la titularidad el volante -y goleador del equipo en el torneo- Lucas Morre, quien no pudo jugar el último domingo por sanción.
De esta manera, el probable once titular de los “Diablos Rojos” que conduce Germán Vicario es el siguiente: Pauletti; Andrés Ferrero, Adrián Peralta, Matías Piovano y Maximiliano Theiler; José Demichelis, Juan Bianchi, Morre y Ezequiel Olmedo o Mayco Rodríguez; Alvaro Nievas y Brusa o Matías Bendazzi.