Una vecina de La Playosa denunció ayer a través de EL DIARIO haber sido también víctima del hombre al que apuntó en nuestra edición del domingo pasado la ciudadana Anita Vega, de Villa Nueva.
Ambas señalaron a Matías Omar Caffaratti como el responsable de haberse quedado con grandes sumas de dinero por construcción de viviendas nunca realizadas.
“Me contacté con Caffaratti por Facebook, luego de que me dijera uno de mis hijos. Entonces vino a mi casa, me trajo carpetas con precios y fotografías de supuestos trabajos realizados. Confié en él”, declaró Ana María Aguirre, de La Playosa.
Firmaron un contrato que estipuló una entrega de 87 mil pesos (de contado), tres cuotas de 4.100 pesos y 33 cuotas de 2.100. Ana María abonó los 87 mil y las tres cuotas de 4.100, cuando constató que Caffaratti ya no daba señales. Hasta entonces “sólo hizo poco, algo de la platea y colocó un hierro”, según especificó la vecina a este matutino.
Aguirre dijo que no hizo la denuncia judicial porque por múltiples consultas realizadas confirmó que Caffaratti no tiene bienes a su nombre, “por lo que todo sería en vano”. No obstante, ayer analizaba reunirse con otros afectados y en conjunto presentarse luego de la feria judicial en la Fiscalía de Turno de Villa María para exponer sus casos. “Al menos que vaya preso por lo que hizo, ya que a la plata no la voy a recuperar”, dijo la señora.
Ana María comentó que había firmado contrato con este hombre en una conocida escribanía villamariense y recalcó que tiene documentación que respalda lo acordado. El dinero estaba destinado a la construcción de una casa para uno de sus hijos.
Este medio intentó infructuosamente dar con Caffaratti. El Facebook que utilizaba aparentemente fue cerrado; hay otro villamariense con idéntico nombre en la red social, que nada tiene que ver con el denunciado.
Cabe recordar que el caso se hizo público en nuestra edición dominical con lo expresado por Anita Vega, una vecina de barrio San Antonio de Villa Nueva, quien tras convenir que Caffaratti le haría dos habitaciones en la planta alta de su vivienda desapareció quedándose con 25 mil pesos.