Con la recepción de seis testimonios continuó ayer el juicio que se le sigue a David Angel Marchetti, acusado de haber abusado sexualmente de una adolescente de 16 años, aprovechando que la misma se encontraba en avanzado estado de ebriedad.
Para hoy, en tanto, está previsto que declaren tres nuevos testigos y se dispuso realizar una inspección ocular al lugar donde se produjo el hecho, aunque esta medida procesal se llevará a cabo si queda tiempo durante la mañana.
Tal como estaba programado, en la víspera comparecieron tres policías, la pareja del acusado y dos amigos de Marchetti que lo acompañaron a la fiesta realizada en el salón del Club Teléfonos, escenario del caso que se procura esclarecer.
En primera instancia comparecieron los funcionarios policiales María Alejandra Olivero, de la Comisaría de la Mujer; Andrea Edith Doriavich, del Comando de Acción Preventiva (CAP), y Lucas del Valle Altamirano, que estuvo trabajando en la investigación.
Pese a tratarse de un juicio de instancia privada, que se realiza a puertas cerradas y, por esa misma razón, impide el acceso de los medios de prensa a la sala de audiencias, pudo saberse que Doriavich fue la primera policía que concurrió al lugar donde apareció deambulando la joven víctima y poco después se hizo presente su colega Olivero.

“Como perdida”

La menor presuntamente abusada fue auxiliada por una vecina del sector mientras caminaba “como perdida” por la calle Congreso, cerca del Mercado de Abasto, en el barrio Industrial de Villa María, es decir a más de 20 cuadras del club villanovense (ubicado en proximidades del puente Alberdi) donde se llevó a cabo la fiesta del ex Colegio Nacional la noche del 30 de setiembre de 2007.
La policía del CAP concurrió al lugar luego que Alejandra Delgado, domiciliada en las inmediaciones, socorriera a la chica en la vía pública en momentos que caminaba sin rumbo fijo. Eran las 7.20 de la mañana y la fiesta había terminado a eso de las 6.
Curiosamente, la testigo nunca declaró durante la instrucción de la causa, motivo por el cual el fiscal de Cámara Subrogante, Horacio Vázquez, solicitó ayer que comparezca para precisar detalles del hecho que la tuvo como protagonista.
Al comparendo de Delgado se sumarán hoy las declaraciones del médico policial Mario Zanettini y de su colega Paola Arriola Armijo, quien se desempeña en el Hospital Regional Pasteur. Ambos profesionales fueron citados en calidad de testigos nuevos por el fiscal Vázquez.
Además de los funcionarios policiales, también compareció la actual pareja de Marchetti, Marta Melisa Brochero, quien entre otras expresiones describió al acusado como “un buen chico, más bien tímido e incapaz de hacer algo así”, en obvia alusión al hecho que se le atribuye y que lo tiene privado de la libertad desde los primeros días de octubre del año pasado.
La testigo, quien a la fecha del hecho era novia del presunto violador, sostuvo que en esas fiestas “circulaba gran cantidad de alcohol” y afirmó que “todos se emborrachaban”. Asimismo, sostuvo que la noche del hecho ella y su pareja se habían peleado, por lo que el joven fue solo a la fiesta.

Imputación

Marchetti, de 23 años de edad, está imputado como presunto autor de “abuso sexual con acceso carnal”, aunque también se le atribuyen hechos de “daño”, “amenazas” y “coacción” a raíz de una pelea que mantuvo con unos vecinos, en una causa iniciada en 2005 que se acumuló a la otra.
También declararon en la víspera dos amigos de Marchetti, que habían ido con él a la fiesta y que a la fecha del supuesto abuso eran menores de edad.
Ambos adolescentes coincidieron en señalar que el acusado estuvo bailando con la chica en cuestión, pero que después la vieron a ella con otro joven. Uno de los testigos dijo que la víctima estaba “muy tomada”, mientras que el otro utilizó la palabra “alegre” para referir el estado de alcoholización que presentaba la menor.
De todos modos, tanto los amigos de Marchetti como las chicas del entorno de la adolescente, que declararon el lunes, ubican al acusado en aquella fiesta en la que hubo “canilla libre” para los concurrentes y a muy bajo costo.
Cabe recordar que mientras el fiscal que instruyó la causa acusó a Marchetti de haber abusado de la menor en un lugar oscuro del predio donde está ubicado el Club Teléfonos, valiéndose de su avanzado estado de ebriedad, el joven admitió haber mantenido relaciones sexuales con ella, pero dijo que la misma fue consentida y que la chica “estaba un poco alegre, pero no borracha”.
Al concluir la audiencia de ayer, el camarista René Gandarillas dispuso un cuarto intermedio hasta hoy a las 8.30, oportunidad en la que declararán Delgado, Zanettini y Arriola Armijo. Si queda tiempo, el juez y las partes realizarán una inspección judicial en la sede del club villanovense.